La Sección Instructora de la Cámara de Diputados cerró formalmente el expediente de la primera solicitud de desafuero contra Alejandro Moreno Cárdenas, dirigente nacional del PRI, luego de que la Fiscalía Anticorrupción de Campeche retirara el caso por presunto enriquecimiento ilícito.
A pesar del cierre, la misma Fiscalía presentó una nueva solicitud de desafuero contra “Alito” Moreno, ahora por cinco cargos distintos:
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Peculado
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Abuso de autoridad
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Usurpación de funciones
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Uso indebido de atribuciones
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Exceso en el ejercicio de funciones públicas
Estos delitos estarían relacionados con un presunto desvío de 83.5 millones de pesos ocurrido durante su periodo como gobernador de Campeche (2015–2019).
El presidente de la Sección Instructora, Hugo Éric Flores Cervantes (Morena), confirmó la recepción formal del expediente, aunque aclaró que aún no ha sido admitido oficialmente. El análisis podría iniciar en septiembre, cuando comience el siguiente periodo ordinario de sesiones del Congreso.
En respuesta, Alejandro Moreno calificó el proceso como una persecución política, señalando que el gobierno busca silenciarlo.
“Me quieren callar, me quieren doblar, pero no van a poder”, afirmó.
El priista reiteró que no teme al juicio político, asegurando que ya ha superado procesos similares y que no hay sustento jurídico en su contra.
Este nuevo intento de retiro del fuero parlamentario ocurre en un contexto donde Morena y sus aliados mantienen mayoría en la Cámara de Diputados, lo que podría influir en el desenlace del procedimiento, dependiendo de los intereses políticos predominantes.