“No hay ningún Gobierno que esté cooperando más con nosotros que el Gobierno de México”, aseguró este miércoles Marco Rubio, secretario de Estado de Donald Trump, desde la cancillería mexicana.
En su primera visita oficial al país, Rubio se reunió con Claudia Sheinbaum en Palacio Nacional, donde ambos mantuvieron una reunión a puerta cerrada, calificada por ambos gobiernos como “productiva, cordial y con una ruta bien definida”. El objetivo: establecer un nuevo acuerdo para desmantelar el crimen organizado transnacional.
Horas más tarde, en una rueda de prensa conjunta con el canciller Juan Ramón de la Fuente, se anunció la creación de un grupo de alto nivel que evaluará periódicamente avances en:
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Contrarrestar a los cárteles
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Fortalecer la seguridad fronteriza
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Eliminar túneles clandestinos
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Atacar flujos financieros ilícitos
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Prevenir el robo de combustible
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Detener el tráfico de armas y drogas
Aunque se evitó revelar detalles operativos, Rubio explicó: “Los narcotraficantes también leen la prensa”. Recordó operativos anteriores como la entrega de 29 capos en febrero y 26 en agosto, operaciones que calificó como “sumamente difíciles”.
El secretario estadounidense elogió el compromiso del Gobierno de Sheinbaum, pero advirtió: “Todavía queda mucho por hacer”.
Por su parte, De la Fuente destacó que en ocho meses de cooperación se han logrado “resultados inobjetables”, como:
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90% menos arrestos de migrantes en la frontera
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Decomisos históricos de fentanilo
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Reducción del 32% en delitos de alto impacto en México
La reunión evitó mencionar los desencuentros recientes entre ambos gobiernos. Apenas semanas atrás, Sheinbaum desmintió públicamente un supuesto operativo conjunto anunciado por la DEA, llamado Operativo Portero. “No hay ningún acuerdo con la DEA”, aclaró entonces.
Ese mismo día, Trump declaró que la presidenta mexicana es “una mujer increíble, muy elegante y hermosa”, pero que “está muy asustada” para aceptar su ayuda militar. Rubio no comentó esas declaraciones, aunque su visita reafirma el interés del gobierno estadounidense en intervenir más activamente en temas de seguridad regional.
Cabe recordar que México no fue incluido en la primera gira latinoamericana de Rubio. En esa ocasión, visitó Panamá, Costa Rica, Guatemala, El Salvador y República Dominicana, donde impulsó acuerdos como el uso de la megacárcel salvadoreña para reos estadounidenses.
Desde Venezuela, el canciller Yván Gil elogió a Sheinbaum por mantener “una postura digna y soberana” frente a EE.UU. y por defender la legalidad y la visión de América Latina como zona de paz.
