La presidenta Claudia Sheinbaum desmintió categóricamente la existencia de un supuesto programa de rescate financiero para Petróleos Mexicanos similar al FOBAPROA, al que algunos han comenzado a llamar “Pemexproa”.
“No hay ningún Pemexproa. Además, jamás haríamos algo similar al FOBAPROA, que estuvo plagado de corrupción”, aseguró durante su conferencia matutina.
Sheinbaum explicó que su gobierno trabaja en un esquema integral y de largo plazo para PEMEX, con el objetivo de sanear sus finanzas y garantizar su viabilidad energética y productiva.
La mandataria hizo un repaso del impacto que dejó la sobreexplotación del yacimiento Cantarell, particularmente durante los sexenios de Vicente Fox y Felipe Calderón.
“Tomaron la decisión de inyectar nitrógeno en lugar de gas para acelerar la extracción, contaminando el gas y provocando un deterioro acelerado del yacimiento”, explicó.
Añadió que esta estrategia permitió alcanzar niveles de producción de hasta 3.8 millones de barriles diarios en 2004, pero con un alto costo ambiental.
Claudia Sheinbaum también detalló que la deuda de PEMEX no es reciente, sino que proviene de decisiones tomadas en los gobiernos de Fox, Calderón y Peña Nieto, incluida una fuerte deuda con proveedores.
“Todo esto, sumado a la apertura del mercado de combustibles y a la corrupción durante el sexenio de Peña Nieto, generó condiciones muy difíciles para PEMEX”, señaló.
Destacó que el presidente López Obrador redujo parte de la deuda y estableció un nuevo esquema de explotación, pero la empresa aún enfrenta grandes desafíos.
La presidenta informó que está por concluir un nuevo plan estratégico para PEMEX, trabajado desde el inicio de su gobierno y reforzado desde el 1º de octubre de 2024.
“Estamos por cerrar un esfuerzo muy importante de planeación financiera y energética, que será presentado pronto”, adelantó.
Finalmente, reiteró que el compromiso de su administración es fortalecer a la empresa productiva del Estado, pero con una visión moderna, sustentable y sin repetir errores del pasado.