La planta de Audi en San José Chiapa enfrenta una crisis tras la imposición de un arancel del 25% a vehículos importados desde México por parte del gobierno de EE.UU. Desde el 3 de abril, la exportación del Audi Q5 —modelo insignia en el mercado estadounidense— está detenida, provocando acumulación de unidades en puertos y aduanas.
La medida amenaza con detener un turno de producción y afecta directamente a más de 1,400 trabajadores. César Orta Briones, secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores de Audi (Sitaudi), calificó la situación como “grave y sin precedentes”.
En marzo de 2025, las exportaciones de Audi México al mercado estadounidense cayeron un 70% respecto al mismo mes de 2024, pasando de 5,717 a solo 1,742 unidades. El fuerte impacto de los aranceles encareció el Q5, reduciendo su competitividad.
Volkswagen, con planta también en Puebla, registró una caída del 27.6% en producción y del 26% en exportaciones, reflejando la gravedad del panorama para la industria automotriz mexicana. Ambas compañías dependen fuertemente del mercado de EE.UU., y la situación pone en riesgo miles de empleos.
Audi ya evalúa diversificar mercados y fortalecer exportaciones hacia otras regiones, aunque resolver la situación comercial con EE.UU. sigue siendo su prioridad.
Esta crisis resalta la vulnerabilidad del sector ante cambios en políticas internacionales y la urgencia de estrategias más resilientes y diversificadas.