En un poco más de dos meses que lleva la nueva administración, la inseguridad sigue siendo un grave flagelo para toda la población. Sin lugar a duda, la violencia ha sido la principal característica en lo que va el gobierno de Claudia Sheinbaum.
El primer día de su administración se registraron un total de 80 homicidios. Octubre se convirtió en el mes más violento de todo 2024. Durante este mes se registraron un total de 2 mil 564 víctimas de homicidios dolosos, habiéndose incrementado en 6.6 por ciento el número de víctimas respecto a los que se sucedieron en octubre de 2023, donde se reportaron 2 mil 405 víctimas.
En Puebla durante lo que va del sexenio de Claudia Sheinbaum se han reportado un total de 183 homicidios dolosos. En tanto que durante todo el sexenio de López Obrador se registraron un total de 6 mil 135 homicidios. En 2024, se ha provocado la friolera de 979 homicidios. Este año, respecto al anterior, ha sido más violento, pues se han cometido más homicidios que en 2023: se cometieron 659.
Aunque en Puebla, a diferencia de otras entidades de la República, la violencia y la inseguridad no avanza a los ritmos tan veloces, se debe apuntar que hay claros barruntos de una progresiva y constante penetración de la violencia de los grupos del crimen organizado.
En los años más recientes se han generado eventos que evidencian las disputas territoriales por parte del crimen organizado han aumentado, no de manera tan alarmante aún, los homicidios violentos donde hay armas de fuego involucradas y se han perdido, últimamente, las garantías de seguridad que existían en los espacios públicos. Todo esto pone en evidencia la creciente violencia que ha empezado a manifestarse en territorio poblano.
Podemos destacar algunos datos que nos arroja la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del tercer trimestre del año en curso, donde se señala que, mientras en el segundo trimestre de 2024 (abril-junio) la percepción social sobre inseguridad pública era de 76.7 por ciento, en septiembre fue de 76.2. Estamos hablando que tres cuartas partes de los encuestados manifestaron sentirse inseguros en su ciudad, en este caso, en la ciudad de Puebla.
Siguiendo con estos datos de la ENSU, aparece también que 65.5 por ciento de los encuestados dijo haber presenciado o escuchado algún robo o asalto a los alrededores de su vivienda, porcentaje, por cierto, muy alto. 35.7 por ciento mencionó que presenció o escuchó sobre la venta o consumo de drogas cerca de su vivienda. Mientras que 57.7 por ciento presenció o escuchó sobre vandalismo. Para 65.1 por ciento de los encuestados, la inseguridad seguirá igual o, inclusive, empeorará. Hay una percepción pesimista respecto al flagelo de la inseguridad pública.
La población en la entidad, en su gran mayoría, se siente insegura al caminar por las calles que usualmente transita, 69.4 por ciento así lo manifestó. El tránsito por las carreteras también genera un alto índice de inseguridad para los poblanos, pues 74.3 por ciento lo indicó así. Y al igual que en otras muchas ciudades del país, el uso del transporte público genera una gran inseguridad para los usuarios, así lo demuestra el porcentaje de poblanos y poblanas que en 86.6 por ciento se manifestó por que el transporte público es sumamente inseguro.
Alejandro Armenta tendrá que diseñar una política de seguridad pública que le devuelva la confianza y les dé certidumbre a las y los poblanos durante su administración, debe analizar lo que funciona de su antecesor y corregir de inmediato lo que no funciona.
