La educación es el motor del desarrollo de cualquier país. Más allá de ser un derecho humano, es el cimiento para construir sociedades más justas, productivas y solidarias. Sin embargo, en México, el sistema educativo enfrenta serios problemas en cuanto a cobertura, calidad y financiamiento, lo cual limita el avance hacia una sociedad más equitativa y preparada para los retos del siglo XXI. Puebla no es la excepción; su nueva administración tiene grandes retos por delante en esta materia.
Uno de los principales problemas es la cobertura educativa, especialmente en niveles superiores. De acuerdo con datos del gobierno, mientras que en educación primaria la cobertura alcanza 101.7 por ciento, en educación secundaria cae a 94.7 por ciento, en nivel medio superior desciende a 72.9 por ciento, y en educación superior se reduce a solo 30.6. Esto significa que solo una pequeña fracción de la población joven tiene acceso a la universidad.
Las barreras para continuar los estudios, como la falta de recursos económicos, la distancia geográfica o la necesidad de trabajar, llevan a muchos a abandonar la educación.
Además de la cobertura, la calidad educativa en México es un tema preocupante. El Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes (PISA), que organiza la OCDE, mide los conocimientos y habilidades de estudiantes de 15 años en áreas como lectura, matemáticas y ciencias. En la prueba de 2022, México se ubicó en el puesto 35 de 37 países evaluados, con un puntaje promedio de 407, muy por debajo del promedio de la OCDE, que es de 478. En comparación, Japón, que lidera la prueba, alcanzó 533 puntos.
Puebla necesita cambiar las tendencias nacionales, el gobernador Armenta deberá dar prioridad a la implementación de políticas públicas que permitan poner a la entidad en mejores niveles educativos, los retos y desafíos son grandes.
1. Cobertura y Deserción Escolar: Aunque en los niveles básicos la cobertura es amplia, en educación media superior y superior disminuye significativamente. Muchos estudiantes en Puebla abandonan sus estudios debido a problemas económicos o a la falta de oportunidades educativas cercanas, especialmente en zonas rurales. Mejorar el acceso a la educación y reducir el abandono escolar en estos niveles es un reto prioritario.
2. Calidad Educativa y Resultados de Aprendizaje: Los estudiantes poblanos, al igual que en el resto del país, enfrentan deficiencias en competencias clave como lectura, matemáticas y ciencias. Los resultados en pruebas estandarizadas (como PISA y PLANEA) muestran que los estudiantes de Puebla están por debajo del promedio nacional en varias áreas, indicando la necesidad de mejorar la capacitación docente y adaptar los planes de estudio.
3. Infraestructura y Recursos: En muchas regiones de Puebla, especialmente en áreas rurales e indígenas, las escuelas enfrentan problemas de infraestructura, desde falta de aulas y laboratorios hasta carencia de servicios básicos como agua potable y electricidad. La falta de tecnología y conectividad limita también las oportunidades para la educación en línea y el acceso a recursos educativos modernos.
4. Educación Inclusiva y Multicultural: Puebla tiene una gran población indígena que habla lenguas como el náhuatl y el totonaco. La inclusión educativa de estos estudiantes es un reto, pues se necesitan programas que consideren la multiculturalidad y promuevan la enseñanza bilingüe e intercultural. Es necesario asegurar que los niños y jóvenes indígenas tengan acceso a una educación de calidad que respete su identidad cultural.
5. Capacitación Docente y Adaptación al Siglo XXI: Para enfrentar los retos actuales, los docentes requieren una formación continua y el desarrollo de competencias en tecnología y pedagogía. La pandemia reveló la importancia de la educación digital, y en Puebla muchos maestros y escuelas no estaban preparados para el cambio. La capacitación y el acceso a herramientas digitales siguen siendo un reto para el estado.
6. Inversión en Educación y Sostenibilidad: Para mejorar la educación, es fundamental aumentar el presupuesto destinado a este sector y garantizar una distribución equitativa de los recursos. En Puebla, es necesario invertir en programas educativos de largo plazo y en el fortalecimiento de las escuelas para que sean sostenibles y logren resultados significativos a futuro.
7. Vinculación con el Sector Productivo: Puebla debe fomentar la vinculación entre las instituciones educativas y el sector productivo para que los estudiantes se preparen en áreas demandadas y tengan mayores oportunidades laborales. Este enfoque dual permite a los jóvenes poblanos adquirir competencias prácticas y alineadas con las necesidades del mercado laboral regional.