En este parón por fecha FIFA, que por cierto no se cansan ni se cansarán de exprimir a los jugadores, y en ese camino ganarse unos dólares para no perder la costumbre, es momento de escribir de equipos que juegan en diferentes ligas, pero que están en la boca de todos. Irán del mejor, al no tan bueno.
Barcelona con un arranque perfecto en puntos y en modelo de juego, haciendo olvidar el tan trillado “tiqui taca”, anteponiendo las características de su plantel, más a modo de un juego moderno, un constante 2 vs 1 por fuera, una llegada por sorpresa de los medios al área, un rejuvenecido Lewandowski y el técnico que no se deja llevar por la historia caduca de un equipo que tiene que jugar con lo que tiene, y tiene mucho, a cambio de guardar en el baúl de los recuerdos el estilo que les dio mucho, pero que ahora no tienen los elementos para hacerlo: dejar la terquedad por la felicidad, más apegado al estilo de los representativos nacionales.
Puebla, que siendo un equipo deportivamente olvidado por su dueño, al no ser prioridad el deporte del futbol en su extensa cartelera de negocios, después del torneo jugado en EU, se agrupó en su sistema defensivo, entendió que esa parte tenía que ser su fuerte, haciendo un equipo con una forma de juego. Ahora, con la llegada de dos atacantes, sin descuidar la base de su juego, que es el orden atrás, intentará tener llegada más concreta con gente con características de atacantes. El técnico entendió lo que tenía y en eso se está basando. De tener un equipo que difícilmente llegaría al lugar 11 o 12, su juego lo llevará a ocupar un lugar entre el 8 al 10. Son un ejemplo de sentido común.
Tigres de Paunovic, y escribo el nombre del técnico porque se adaptó a una historia de juego del equipo de más de 10 años con el Sr. Tuca. Quizá no sea el juego que le gusta, pero sin ningún problema cambia su estilo porque la base de ese equipo sigue siendo los jugadores Carioca, Pizarro, Gignac, Guzman. Trajeron un defensor brasileño serio y eficaz y un sinfín de buenos jugadores mexicanos haciendo una combinación de veteranos con juventud, respetando el estilo semilento y dando velocidad en el último tercio. Tiene la mejor plantilla en cuanto a calidad y cantidad.
Cruz Azul, equipo que necesitaba de refuerzos y que llegaron cuatro de calidad. El problema esque se le fueron cuatro también de calidad. Entonces, el Sr. Anselmi regresó a su plan inicial, dos puntas complementarias en sus características, dos carrileros con mucha llegada, un portero muy seguro, una línea de tres centrales segura y con salida y un medio campo que sabe recuperar y dar la pelota donde hace daño. La llegada de
Romo lo hace más funcional porque ocupa un lugar seguro cuando defiende y cuando ataca, pone cierto desorden, característica importante al no saber el rival por donde llegará. Si no tiene lesiones, expulsiones o bajas de juego, con un plantel pequeño y apto para darle oportunidad a jóvenes de su cantera, este equipo llegará lejos.
América, y empieza lo malo. Un equipo acostumbrado a jugar por fuera hoy tiene que improvisar esas posiciones porque Zendejas y Quiñones no están y Rodriguez, con pocos juegos de inicialista, hoy tiene que ser titular, y por la derecha siempre inventando a quien pongan por ese lado. Todo esto provoca un juego muy central, al ancho del área grande y, por lo mismo, evidente para el rival. Las paredes, Fidalgo, Valdez y Martín, son pan con lo mismo y fáciles de romper ante equipos que se agrupan en zona defensiva. Atrás, más por lesiones, tienen que improvisar con Araujo que dejó de ser el jugador que estuvo en la liga de España. No es que no quieran, es que no tienen quien cumpla con las funciones del equipo campeón y su directiva no veo que se mueva para traer a uno eficiente por izquierda y que pueda abrir la cancha para quitar el tránsito central. De sus fuerzas básicas nada sale desde que llegaron los españoles con muchos conocimientos, pero sin implementarlos a lo que es el América. En ese rubro, siempre extrañarán la salida del Capi Tena.
Real Madrid, el peor de lo visto. Ahora es más el París, repleto de cromos, que el equipo eficaz que ganaba todo. Mbappe no se necesitaba, era más importante traer al mejor lateral izquierdo del mundo o a un medio de las características del retirado Kroos. El equipo está partido entre los cuatro que atacan, los dos que están en medio campo y una defensiva que no tiene quién les contenga y que cualquier equipo, ante la recuperación de la pelota, los mete en problemas por los grandes espacios que dejan. El Sr. Florentino ya tiene a su estrella, ganó la batalla de la vanidad, pero destruyó un equipo. Tiene el Ferrari, pero al no tener cochera, lo guarda en su sala, con el hecho que destruyó su casa; ahora su familia, su equipo, tiene que comer en el capacete del Ferrari.