Empleo y seguridad son los temas que se encuentran en la agenda de prioridades del gobierno de Alejandro Armenta Mier y en estos días ha dado muestra evidente de eso. Por ejemplo, la Secretaría de Seguridad Pública estatal, a cargo del vicealmirante Francisco Sánchez González, hizo frente a la inseguridad que enfrentan restaurantes y comercios en la entidad con la propuesta de instalar botones de pánico que servirán, entre otras cosas, para tener una respuesta rápida ante cualquier atraco.
Eso es acompañado con otra demanda muy sentida entre los empresarios: la seguridad en las carreteras. Y para ello, el gobierno del estado asumió el control de algunas vías concesionadas, además de intensificar, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana federal, el Ejército, la Guardia Nacional y la Marina, los tramos con los índices más altos de reportes de robos.
A la par, está en marcha una importante inversión en la adquisición de 100 nuevas patrullas y 10 torres de vigilancia con tecnología de punta, lo mismo que el impulso de convenios de colaboración con estados vecinos para blindar las fronteras de la entidad.
En la otra ruta, el gobernador signó un acuerdo trascendental, sino es que histórico, para que empresarios, gobierno y trabajadores impulsen una estrategia conjunta para atender la precariedad laboral y dar paso a un Pacto a Favor del Empleo.
En los hechos es una apuesta muy interesante para garantizar un equilibrio en las relaciones obrero-patronales y eso lleve no solo a incentivar la apertura de más plazas sino fortalecer el poder adquisitivo de los poblanos, con valores agregados como capacitación, cadenas de valor y un modelo endógeno de desarrollo.
No es una buena intención del gobierno sino una realidad, ya que en la firma del pacto y la estrategia participaron el Consejo Coordinador Empresarial, los principales centrales sindicales de Puebla y el sector oficial.
Todo esto se traducirá en incentivos y apoyos tanto para empresas como para los trabajadores, además de que el gobierno cumple con velar los derechos sociales y laborales, de acuerdo con la visión de la 4T.