El senador Alejandro Armenta Mier está en una posición muy incómoda: Ser fiel a la 4T (aunque sea un priista recalcitrante) y navegar entre la guerra intestina que se genera en el Senado de la República. Como sabe que no puede trascender en la parte nacional, el expresidente municipal de Acatzingo (aunque en realidad nació en Izúcar de Matamoros) apuesta por denostar y lanzar todas las baterías contra los aspirantes a Casa Aguayo. Su estrategia es tan burda que se cae por su propio peso. ¿Cuál es la verdadera estrategia del senador marinista? Desviar la atención de la discusión nacional que está alrededor del Senado y que evidencia la ausencia de un verdadero presidente de la Mesa Directiva de la Cámara alta que pueda alcanzar acuerdos y servir a la 4T. Por eso es más fácil lanzar lodo a los aspirantes poblanos a la gubernatura en 2024 que asumir los yerros en la presidencia del Senado. ¿Puede Alejandro Armenta sumar a los opositores del presidente de la República? No y no es porque no quiera, simplemente no tienen la estatura política para concretarlo. Armenta no lo sabe, pero toda vemos cada día que es un peón más en la guerra intestina de Morena. La pregunta de oro: ¿Cuánto tardará en traicionar a Monreal? Es cuanto, señor senador.
LA IGNORANCIA SUPINA Y LA MALA LECHE
Mariano Cruz Ramírez, presidente de la Comisión de Gobernación, Justicia, Seguridad Pública y Protección Civil del municipio de Tecamachalco, es un personaje menor que está enamorado políticamente del diputado federal Moisés Ignacio Mier Velazco. Y cómo no si es el principal encargado de arreglar todas las torpezas del retoño del legislador, Carlos Ignacio Mier Bañuelos, un sujeto que dice ser presidente municipal de Tecamachalco, pero en realidad se dedica a vivir la vida loca. Hace unos días, Cruz Ramírez se aventó la puntada de decir que desde la Secretaría de Gobernación estatal se había casi boicoteado la posibilidad de que los uniformados municipales tengo acceso a una credencial de portación de armas. El asunto no es menor, ya que prácticamente se está acusando al gobierno del estado de una irregularidad. Pero la realidad es otra. El director de Delegaciones de la Segob estatal, Andrés Villegas, fue señalado por el funcionario menor de obstaculizar el trámite, cuando en realidad esa facultad compete a la Secretaría de Seguridad Pública estatal. Al conocer la versión del regidor mierdista, Villegas no se amilanó y respondió duro al funcionario, a quien hizo quedar como un tonto e inexperimentado. Ni modo, como dijera el dicho, “con estos bueyes nos tocó arar”.
CLAUDIA Y LOS RESULTADOS
La jefa del Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha logrado en muy pocos meses pasar de la categoría de favorita del presidente Andrés Manuel López Obrador a demostrar que su trabajo habla por sí mismo. No es fácil para ningún político de la Ciudad de México decir que hay avances en seguridad o combate a la marginación, pero la aspirante presidencial puede presumir que hay respaldo a su propuesta. Los resultados no son de un día para otro, los ciudadanos lo entienden y por eso el bono democrático para la morenista sigue siendo muy alto. ¿Logrará capitalizarlo? Sin duda. Eso y más está por verse en la estrategia de quien ha sido menospreciada por la clase política. Esas personas son las que terminan ganando el juego del sentido común.
