El gobernador Miguel Barbosa Huerta cuestionó que, con todo y las pruebas que aportó su administración respecto al desalojo de los normalistas de Teteles, ocurrido el pasado 1 de junio, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) haya emitido una recomendación por presuntas violaciones a sus derechos humanos, lo que pone en duda su actuar.
No obstante, dijo que su gobierno realizará un análisis del contenido de la recomendación 161/2022 que emitió en contra de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, en la que se señalan presuntas violaciones a los derechos humanos de los estudiantes.
En el documento, del cual dio cuenta el periodista Ignacio Juárez, se señala que fueron violados sus derechos a la libertad de expresión y protesta social, además de haber sufrido actos crueles e inhumanos, pero como se recordará, a los estudiantes les fueron aseguradas bombas molotov y bidones con gasolina.
El mandatario recordó que los hechos públicos durante todo el día que duró la protesta en Casa Aguayo el pasado 1 de junio, e inclusive quedó grabado el momento en que irrumpieron los estudiantes, tanto de la normal de Teteles, como de otras normales del país, entre ellas la de Ayotzinapa.
Los estudiantes utilizaron algunos autobuses para chocar contra las rejas que resguardaban Casa Aguayo, pues su objetivo era introducirse e incendiar el recinto que ocupa el poder Ejecutivo estatal.
“A partir de ese momento fue todo un asunto de crisis durante horas y al formación y construcción de bombas molotov fue a la vista de todos, con gasolina, mechas y todo, todo se transmitió”, explicó.
Refirió que todo el material audiovisual en poder de las autoridades fue entregado a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, que preside Rosario Ibarra de Piedra, como parte del expediente de la queja integrada por las alumnas de la normal de Teteles.
“Si a pesar de todo eso que se presentó y toda a la argumentación, vino esta recomendación, qué creemos nosotros, pues que la Comisión Nacional no puede dar otras resoluciones más que en este sentido, a pesar de todas las pruebas. Estamos tranquilos nosotros como gobierno frente a la opinión pública, este tipo de recomendaciones lo único que hace es dudar del papel que juega la Comisión Nacional de Derechos Humanos, se pone en duda para la gente”, puntualizó Barbosa Huerta.
Y es que criticó que, pese a las pruebas, pareciera que se tiene la intención de creer únicamente la versión de las estudiantes, a pesar de que sus argumentos estén llenos de mentiras, porque el papel de la Comisión es “creerles a como dé lugar”, acotó.
El mandatario dijo que se respetará la resolución y su gobierno realizará el análisis de los puntos que contiene el expediente 161/2022, aunque sentenció que “no es verdad lo que ahí está asentado, no se violó ningún derecho humano, cuando se intervino es porque ya iban a incendiar Casa Aguayo”, apuntó.
En ese sentido, dijo que debido a la oportuna intervención de la autoridad se evitó que la antigua casa que ahora ocupa el Ejecutivo fuera dañada, no obstante que las presuntas responsables de los desmanes fueron puestas a disposición del ministerio público y este las dejó en libertad.
“Los muchachos que llegaron con palos y armados, hubo policías lesionados, costillas rotas, cabezas, uno estuvo muy grave, muy grave por daños al hígado, el golpe le lastimó el hígado y tuvieron que hacerle operaciones, estuvo muy grave de muerte, no sé si eso lo tome en cuenta la Comisión Nacional de Derechos Humanos o no, pero voy a hacer muy cuidadoso, porque ante la opinión pública ahí están los hechos”, comentó.
Miguel Barbosa consideró necesario que la opinión pública conozca cómo ocurrieron los hechos del pasado 1 de junio, para que sea la ciudadanía quien ponga en su justa dimensión lo ocurrido contra la recomendación que emitió la CNDH, por ello instruyó al área de comunicación social a difundir los videos del día de la protesta.
De acuerdo con imágenes difundidas sobre el desalojo ocurrido la tarde del 1 de junio de este año, la policía estatal decomisó varios litros de gasolina, latas de pintura, botellas de refresco de cristal con pañuelos dentro, con las características de la hechura de una bomba casera, además de dos muñecos de trapos con banderas de Puebla y Chiapas, y escudos de madera que utilizarían como protección al irrumpir en el recinto.
Con este arsenal, las normalistas de la Normal Rural “Carmen Serdán”, ubicada en Teteles de Ávila Castillo, sitiaron Casa Aguayo e irrumpieron impactando algunas unidades en contra de las barricadas colocadas.
