La delgada línea de la cordura y la sin razón.
¿Cuándo se cruza?
¿En qué momento una persona con metas y anhelos, decide convertirse en un esclavo de sus acciones y arruinar su vida junto con la de los otros?
¿Dónde queda el talante, la capacidad de negociar, de debatir, de llegar a acuerdos?
¿Qué es la justicia para una mente obnubilada?
Tomar la vida de alguien más para poder caber en un mundo que te ha castigado constantemente, no porque el mundo tenga algo personal contra ti, sino por no saber apropiarse de él mediante la virtud.
¿Cómo se planea una acción que, de ser descubierta, será también tu propia tumba?
¿Qué mira el debutante de la sangre cuando, por la mañana, se levanta y va a lavarse la cara, los dientes, las manos?
¿Qué pulsión se apodera de su cuerpo?
¿Cómo siente el paso cabalgante de su sangre por las venas?
¿Cuáles son las palabras que se repite una y otra vez para convencerse y no recular?
¿Qué tipo de veneno injerta en su corazón para asistir a la ceremonia que malogre el destino?
La maldad existe porque existe la bondad, cierto.
El hombre nace bueno, al menos eso dicen los filósofos; el gran pervertidor es el tiempo, el mundo, el ambiente donde se desarrolla, y el poder (pequeño o grande).
El poder es un arma que no se presta, pero cuidado: esa arma se covierte en un boomerang.
Hay sabios de oriente que se inmolan en la plaza pública como una ceremonia de honor.
Pero acá en occidente, el inmolado no aspira a un bien superior; acaba por quemarse involutariamente en un arrebato de soberbia y estupidez.
Hay muertos que sí hacen ruido.
Cecilia Monzón es nuestro ejemplo más próximo.
Sus victimarios terminaron cayendo a causa de los decibeles de sus torpezas.
El verdugo pierde de otra forma la cabeza en el momento en el que deja caer su hoja de metal.
Nadie sale ileso del pasado, pero el que perece por su causa es quien se la pasa lamiéndose la herida, evitando que cierre.
Javier López Zavala fue detenido por, presunatemente, pergeñar el crimen contra la mujer que un día habitó en su corazón.
El futuro nadie lo puede saber. No existe.
Pero algún día llega.
¿Cómo verse desde ahí?
Más valdría hacer un zapping para saltar el capítulo que te llevó a vivir una película de horror.
El horror no empieza cuando eres descubierto.
Comienza en el momento en el que, mirandote al espejo mientras te lavas los dientes, decides dar el primer paso hacia tu propia ruina.
