En su nuevo documental Stans, el rapero estadounidense Eminem repasa algunos de los episodios más difíciles de su vida, incluyendo la sobredosis casi mortal que sufrió en 2007 y que marcó un punto de inflexión en su lucha contra las adicciones.
El artista, de 52 años, relata que su consumo de drogas se intensificó tras el asesinato en 2006 de su amigo y compañero de escenario Proof.
“Tomaba de 75 a 80 Valiums por noche. No sé cómo sigo aquí”, admite en el filme, dirigido por Steven Leckart.
Sobre el episodio que lo obligó a buscar ayuda, recuerda:
“Después de la sobredosis, volví a casa pensando: ‘Voy a morir si no hago algo’”.
Ese momento, afirma, fue el inicio de un proceso de rehabilitación que le ha permitido mantenerse sobrio desde abril de 2008.
En la cinta, Eminem confiesa que uno de los detonantes para mantenerse limpio fue perderse un momento importante en la vida de su hija Hailie a causa de las drogas. Al ver un video del evento, se prometió no volver a poner en riesgo su papel como padre.
“Si no puedes hacerlo por ti mismo… hazlo por ellos”, reflexiona.
Con 17 años de sobriedad, el rapero considera que superar su adicción ha sido “un superpoder” que le permitió reconstruir su vida personal y profesional.
Stans también explora la conexión de Eminem con sus seguidores más fieles, combinando material inédito, recreaciones y testimonios de figuras como Dr. Dre, Ed Sheeran y LL Cool J. El documental se estrenó en cines de Estados Unidos del 7 al 10 de agosto y próximamente estará disponible en Paramount+.
Durante la premiere en Nueva York, el artista agradeció el apoyo de sus fans:
“Gracias desde el fondo de mi corazón”, expresó.
