El sábado por la mañana amanecimos con la noticia de que finalmente llegó un Gobernador a Puebla que va a hacer algo realmente importante por el equipo de la Franja y su afición.
La noticia de que el Gobierno del Estado, por parte de su titular Alejandro Armenta aportará unos terrenos para que finalmente el equipo PUEBLA cuente con unas instalaciones propias para poder desarrollar sus entrenamientos y preparación para sus compromisos.
Debemos recordar que el Club Puebla es uno de los pocos equipos de primera división que nunca ha contado con instalaciónes propias para preparar sus encuentros.
Algo importante y, que creo pasó un poco de lado, es el hecho de que de acuerdo a lo declarado por el Sr. Gobernador, los terrenos e instalaciones serán dadas al equipo PUEBLA y no al dueño del equipo, sea quien sea.
Es decir si el Club Puebla cambia de dueño en el corto o mediano plazo, las instalaciones las operará el dueño en turno pero sin poseer la propiedad.
Con esto se garantiza que no venga algún vivales para hacerse de los terrenos como propiedad y de esta manera el Club Puebla, esté en manos de quien esté, contará con esas instalaciones de manera permanente.
Como contraprestación el Club Puebla se obliga a aportar el nombre y la funcionalidad de distintas escuelas de fútbol al interior del estado, con la finalidad de lograr formar jugadores poblanos, los cuales de verdad escasean en nuestro estado.
En lo personal, me parece un gran acierto por parte del Gobernador Armenta, quien demuestra el interés de su gestión por promover el deporte y la formación de jugadores para nuestro estado.
Los acuerdos se tomaron precisamente en el CIS, en la oficina del Gobernador, a donde llegó Gabriel Saucedo, director general del Club Puebla, acompañado del Rector de la universidad del deporte en Puebla Jose Luis Juan Sánchez Solá, quien ayudó a que esta reunión pudiera concretarse.
Esperemos que todos estos acuerdos se concreten a la brevedad y que los frutos de estos se vean reflejados en el progreso del fútbol poblano.
Miserias futbolísticas.
Crecimos viendo y consumiendo fútbol, compañeros de mi generación podrían dar cuenta de lo que les digo.
Obviamente eran otros tiempos, otras formas y otras maneras, sin embargo, me parece increíble que el fútbol mexicano, tanto a nivel clubes como a nivel selección haya decrecido de manera tan burda, tan ruin, mostrando una miseria futbolistica que de verdad duele y duele mucho.
En lo que refiere al Club Puebla se tuvo que llegar al límite de traer a un director deportivo como Rafael ‘Chiquis’ García, quien con su experiencia como campeón y mundialista en su paso como jugador y también como director técnico, tendrá que aplicar todo lo aprendido para armar un cuadro competitivo basado en limitantes económicas, que lo obligan a armar una escuadra basada en jóvenes talentos, que en su mayoría tendrían las puertas cerradas en otros equipos del máximo circuito, pero que en Puebla tendrán la grandísima oportunidad de destacar en este complicado ambiente como es el fútbol profesional.
La misión del ‘Chiquis’, quien con el respaldo de Gabriel Saucedo intentarán sacar a la Franja de la miseria en la que lo sumergio Ro(b)a y su séquito de amantes y ladrones durante los últimos años.
Al momento, el funcionamiento de este experimento es incierto, pero al menos se agradece que se intente realizar algo diferente a lo que hemos venido observando en el último lustro en el fútbol poblano.
Los nombres de los jóvenes que van llegando son lo de menos, lo verdaderamente importante será ver el desarrollo futbolístico de estos jóvenes que tomarán la alternativa durante el próximo torneo.
Otra miseria, la Selección Nacional.
A nivel selección mexicana las miserias son iguales o de mayor dimensión.
La selección vive en un estado de urgencia permanente, donde la exigencia es brutal y quien se siente en el banquillo estará en un barril de pólvora.
Es inadmisible ver la actuación de la Selección Mexicana frente a su similar de República Dominicana, donde aún y cuando se ganó tres goles a dos, se terminó teniendo una actuación vergonzosa, donde se acabó pidiendo el silbatazo final ante el riesgo inminente de ser empatados por una selección de un nivel muy, pero muy inferior, bueno, al menos en el papel.
Veremos cómo se vienen los siguientes partidos de la Copa Oro, pues es el último torneo oficial previo a la Copa de Mundo, que ya esta a menos de un año de iniciar.
Nosotros como siempre seguiremos en línea. Hasta la próxima.
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