Llegué al aeropuerto de Lima vestida de enahuas.
Entre el tumulto resaltábamos una cantidad considerable de “disfrazados”, como peyorativamente el común de la gente llama a los que vestimos con alguna indumentaria tradicional. Sin marca o sin etiqueta cosmopolita de algún youtuber.
En este -No Lugar- llamado aeropuerto, destacaban las plumas de los Sioux, los iterativos rostros esgrafiados de los Asháninkas, los penachos abundantes de los Sataeo’o, mejor conocidos como Cheyennes, los laberintos fluviales de los trajes Shipibo, los enérgicos contrastes de la geometría Aymara…
En ese momento no pude evitar recordar la historia y una frase de Tatanka Yotanka¹, que tiene el nombre de mi difunta cuenta de Facebook, por cierto.
…“When the last tree is felled, when the last bird is captured … Only then will man understand that greed does not provide food”.Perú
En el modesto aeropuerto de Juliaca, Perú, fuimos bienvenidos por una comisión de la IV CUMBRE CONTINENTAL DE PUEBLOS Y NACIONALIDADES INDÍGENAS DEL ABYA YALA y LA I CUMBRE CONTINENTAL DE LA MUJER INDÍGENA.
Bailando en círculo a modo de ofrenda, sonaban las kenas, los sikus y los charangos tipo maulincho, algunos con caparazón de armadillo y otros de madera, con aguayos coloridos y huaynos rechinantes nos estaban esperando.
Entre bailes y risas me sentí como en casa.
La Cumbre se desarrolló en la Universidad Nacional del Altiplano, en frente del Lago Titikaka. Se habló del concepto de Territorio consolidado un par de meses atrás en la Declaración de Temuko, Chile:
“El territorio es todo aquello que habitamos, vemos y sentimos, e implica la interacción diaria con el mar, el cielo y sus elementos vivos. Se relaciona con nuestro sentido de pertenencia y con la protección y defensa de la Madre Naturaleza”.
Lo primero que hice al salir de la plenaria inaugural y tomar registro fotográfico y mental de cada detalle, fue dirigirme a la Mesa de Comunicación Intercultural.
Se habló de la diversidad lingüística, de la importancia del resguardo y la difusión digna de las lenguas.
Mi misión era escribir una crónica para el Diario El Columnista, presentar los trabajos de difusión y fortalecimiento de las lenguas indígenas que hacíamos en México y mostrar una cara de la literatura indígena contemporánea que en ese tiempo no estaba de moda.
Me limité a observar y comparar los discursos identitarios de cada personaje con los discursos difusionistas del siglo XX.
Indirectamente me di cuenta de que una persona de ciudad, homogeniza una serie de valores que son construidos y sintetizados en tipos de relaciones, cual contratos sociales.
Para entender mejor esta idea, describo lo siguiente:
Si una persona entra a un Oxxo y consume un producto, la mayor probabilidad es que el vendedor entregue el producto y cobre. Una posibilidad podría ser: que además de cerrar la conversación y el intercambio comercial con un: “gracias”, como plus le deseé buen día.
Contrasté esta práctica cotidiana de la urbe con una serie de saludos dependiendo el contexto y el receptor que tiene la lengua Quechwa de los Andes y que suelen tener muchas lenguas indígenas. Saludos que básicamente dignifican la presencia de la persona que escucha con la persona que habla. Incluso hay saludos que se limitan a evidenciar el paso de una persona ante la presencia de otra, como el /ɲau/ de Naupan, que se podría interpretar como “Voy pasando para irme”. O como el profundo y filosófico saludo para los mayores en la Sierra Poblana: Tlen kiijtoa moyolotl: ¿Qué dice tu corazón?
Las diferencias culturales pueden demarcarse con la lengua, la cual, desde nuestra reflexión, está emparentada con la estructura del pensamiento y en los modos de asumir una realidad colectiva.
Entre más usada y más vehicular² sea una lengua, pierde semanticidad y gana léxico (es decir, palabras) como el inglés con aproximadamente un millón de entradas léxicas y una sintaxis muy estática.
Existen múltiples formas de nombrar a México, de entender el entorno, el territorio y el Continente. Porque Abya Yala significa “La tierra de los mil colores”.
Los estudios de Tzvetan Todorov en sus textos sobre la Conquista de América como choque cultural y reflexionados desde la lengua y el pensamiento, desglosan cómo el descubrimiento del Yo es posible a través del descubrimiento del Otro, siendo una abstracción construida por el Yo.
Desafortunadamente todavía seguimos viviendo procesos de asimilación del indígena.
Pero la lengua es una herramienta que tiene mucho contenido cultural, descifrable y decodificable, listo para ser interpretado.
Si cada vez más nuestra lengua española pierde contenido, es muy probable que el hipócrita lector no comprenda que la frase ¿Keski xihuitl tikpia? (para preguntar la edad en náhuatl) literalmente significa: ¿Cuántas veces has visto reverdecer la tierra?
Al llegar al aeropuerto de México tuve la siguiente reflexión:
Un “disfraz”, a diferencia de un sistema de códigos como es la vestimenta tradicional, no perdura toda la vida: Las cosas fingidas siempre vuelven a su condición natural.
Tlazocamati miac
Tatiana Bernaldez
¹Líder Sioux (Toro sentado).
² Adm. Lengua usada habitualmente por la comunidad educativa en sus relaciones cuando existen diversas lenguas maternas entre sus miembros. Equivale al tradicional concepto de lengua franca. Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española.