25.2 C
Puebla
martes, agosto 12, 2025

Buscan esclarecer muerte de joven hallado en casa contigua a la de Gustavo Cerati

La desaparición de Diego Fernández Lima, ocurrida hace más de 41 años, tuvo un giro inesperado cuando en mayo pasado unos albañiles hallaron restos humanos enterrados en una vivienda del barrio porteño de Coghlan, justo al lado de la casa que en la década de 1980 fue habitada por el músico Gustavo Cerati.

Diego tenía 16 años cuando, el 26 de julio de 1984, salió de su casa con una mandarina en la mano para visitar a un amigo y luego asistir a la escuela. Nunca volvió. El hallazgo de los restos, acompañado de objetos personales como un reloj Casio con calculadora, un corbatín y una moneda, llevó a la realización de pruebas de ADN que confirmaron que pertenecen al adolescente desaparecido.

El Equipo Argentino de Antropología Forense determinó que Fernández Lima murió de forma violenta y presentaba lesiones compatibles con puñaladas, además de indicios de un posible intento de desmembramiento. El cuerpo estaba enterrado en el jardín de una propiedad donde vivía Cristian Graf, excompañero de colegio del joven, quien hoy niega cualquier responsabilidad.

El caso generó gran repercusión mediática por la cercanía con la antigua casa de Cerati, aunque las autoridades aclararon que el músico no tuvo relación alguna con el hecho. La investigación está a cargo del fiscal Martín López Perrando, que ya tomó declaraciones a testigos y personas vinculadas a la víctima.

El hermano de Diego, Javier Fernández, pidió justicia y recordó que su padre murió sin conocer el paradero de su hijo: “Necesito justicia por mi hermano, por mi mamá, por mi papá… Mi papá murió buscándolo”.

Últimas noticias

Más leídas

Más artículos