Vanessa Barahona, Claudia Barbosa y Olga Méndez, entre otras, ya están metidas en la precampaña de Ignacio Mier Velasco.
Pero, faltaba más, lo hacen desde la sombra, a través de una organización de mujeres de dudoso origen.
La exsecretaria de Turismo (Barahona), la exconsejera del Instituto Estatal Electoral (Barbosa) y la exdirigente de la Canirac (Méndez) se han venido sumando a las actividades proselitistas del coordinador de Morena en San Lázaro una vez que fueron reclutadas por una señora con nulas credenciales en la defensa de las mujeres.
Una de sus participaciones más reciente se dio en la comida ofrecida a Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, en el Club de Empresarios de Puebla.
Las ahora adictas a Mier recurrieron a una de las formas más primitivas de la política mexicana en ese acto: la “cargada”.
Sólo les faltó mover el abanico y la matraca.
También —según rezan sus redes sociales— han acudido a actos en San Martín Texmelucan para apoyar al diputado federal.
Sus lugares de reunión varían.
Cuando no van al restaurante Las palomas, en Atlixco, acuden a La Noria, del que es socia la señora Méndez.
Fue en La Noria, precisamente, donde Olga Méndez le celebró el cumpleaños a Vanesa Barahona, quien salió de Turismo tras detectarse diversas irregularidades.
Barahona se comporta como si esas irregularidades no hubiesen existido, pese a que hay una carpeta en la que se detallan los abusos que cometió a su paso por esa dependencia.
Claudia Barbosa —cómo olvidarlo— fue consejera en la elección más conflictiva en la historia reciente de Puebla: la de 2018.
Su papel en dichos comicios fue lamentable.
Cómo olvidarlo.
Hay que decir que Olga Méndez —quien se ostenta como contadora pese a que carece de cédula profesional— busca ser dirigente del Consejo Coordinador Empresarial, por lo que lo mismo finge apoyar a Eduardo Rivera Pérez, alcalde de Puebla, que a otros personajes.
Lo cierto es que su adicción a Mier está más que comprobada.
(Su posición en la Canirac se la debe a Taico Alarcón, actual presidente del Consejo Coordinador Empresarial, a quien, por cierto, terminó por traicionar).
Cada vez que puede —y puede mucho— no duda en írsele encima a Olivia Salomón, secretaria de Economía.
En sus redes sociales, la “contadora” Méndez ya mandó a hacer un logo con su nombre y los colores de Morena.
Y es que Mier ya les prometió que serán candidatas a diputadas en 2024.
Mientras llega ese día, hacen proselitismo por su candidato y hasta organizan porras de una manera muy rupestre para que el multicitado las vea y las tome en cuenta.
¡Qué papelón!
Terror en la autopista. La autopista Tlaxco—Tejocotal, cuya concesión le fue otorgada a Pinfra desde los tiempos de Rafael Moreno Valle, se ha convertido en un auténtico riesgo para quienes circulan por ella.
Además de las piedras que suelen lanzar en contra de los autos desde los puentes, los delincuentes roban, secuestran y hasta matan a los usuarios que transitan por ahí.
Hay veintitrés brechas abiertas ilegalmente.
Por ahí surgen de pronto pick-ups y hasta camionetas Suburban para cometer sus fechorías.
No faltan las armas de fuego en esta trama de terror.
Para obligar a los viajeros a detenerse, las bandas disparan a las llantas y luego —si bien les va— les quitan los vehículos tras la golpiza de rigor.
Pinfra, incluso, ya legalizó una de esa brechas clandestinas.
En protesta por la inseguridad, empresarios de Zacatlán y Chignahuapan entregaron este viernes un pliego petitorio al representante de Pinfra.
El fin: exigir seguridad.
El pasado 31 de marzo, dos mujeres fueron asesinadas en esa autopista.
Y antes aún, el 20 de julio de 2021, fue asesinado brutalmente un reconocido empresario de la región pese a viajar en un vehículo blindado.
Antes éstas quejas, Pinfra no ha dado respuesta alguna.
La indiferencia es el sello de la casa.
La poderosa familia Peñaloza —propietaria de la empresa— ni siquiera se inmuta.