Todo surgió de manera espontánea.
Y la vida, así como es, dejó que una cosa llevara a la otra.
El chispazo ocurrió el pasado 15 de septiembre en Nueva York, en la celebración del Mexican Day Parade. Alejandro Armenta Mier y la cantante Belinda fueron los invitados de honor de la comunidad mexicana. El entendimiento fue inmediato y ahí fue donde todo comenzó.
-Gobernador, me encanta Puebla, quisiera grabar un video allá.
Palabras más, palabras menos eso fue lo que la joven cantante le susurró al entonces mandatario electo.
La respuesta no se hizo esperar y quién mejor para cerrar la pinza que Cecy Arellano, presidenta del Sistema Estatal DIF.
Hace 15 días, la esposa del gobernador invitó a comer a Belinda. Allí, le platicó de las locaciones más importantes y hermosas de Puebla. Le sugirió sitios y la enamoró todavía más de la entidad.
Pero también, Cecy Arellano tuvo la oportunidad de explicarle a la afamada artista la otra cara relacionada con el DIF: niños abandonados, sustraídos de un hogar violento y abusivo; jóvenes corridos de sus casas, que huyeron por el caso sexual o violencia. Todos alojados, atendidos y bajo salvaguarda del organismo.
La cantante recuerda que aquellas palabras le estrujaron el corazón y puso manos a la obra.
Convencida de las sugerencias de Cecy Arellano, desplegó a su equipo para grabar el video de su nueva canción, a estrenarse en enero de 2025, en varias locaciones del estado.
Luego, como sorpresa, anunció que quería donar juguetes y ropa para los niños y adolescentes que tiene el DIF en resguardo.
Y allí estuvieron ambas este domingo frente a decenas de chamaquitos que no daban crédito de dos cosas: tener regalos sorpresa y que se los entregara una estrella.
Alejada de los reflectores, enfundada de negro: abrigo de cuero, pantalón, blusa y gorra, Belinda entregaba juguetes, dulces. Los niños se arremolinaban a su alrededor y algunos, más vivos que otros, pedían dos o tres veces un regalo.
Junto con la cantante, Cecy Arellano acompañaba la tarea, lo mismo que Alejandro y Cristy Armenta Arellano; y el coordinador de Gabinete, José Luis García Flores, principal responsable de atender a la autora de Utopía, quien un día antes también acudió como invitada especial a la comida que ofreció Alejandro Armenta en Casa Puebla con motivo de su toma de protesta.
(En esa comida, también estuvo Julión Álvarez, amigo del gobernador, quien no dejó escapar la oportunidad de un palomazo para deleite de Armenta).
Sencilla, franca, con voz delicada y el eclipse que provocan sus ojos verdes, Belinda tomó un tiempo para explicar a columnistas y dueños de medios de comunicación su paso por Puebla. Todo es de corazón, repetía.
Y Cecy Arellano no dejó pasar la oportunidad de confirmarlo. “Tiene un gran corazón”, fue la definición de la presidenta del DIF estatal.
La química que surgió entre ambas, cuyo chispazo ocurrió en Nueva York, aquel 15 de septiembre, se hizo evidente ayer entre decenas de chiquillos emocionados.
La artista y Cecy llevaron un regalo que cubrió, en ese momento, la emoción de una vida golpeada por el infortunio.