Por mayoría de votos, el Congreso de Puebla nombró este miércoles a Rosa Isela Sánchez Soya como nueva presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado (CDHE).
Durante la Sesión Pública Ordinaria, Sánchez Soya recibió 35 votos a favor y ninguno en contra, lo que significó más de dos terceras partes de los sufragios. Cuatro diputados de la oposición anularon su voto, mientras que el otro participante, Marco Antonio Moreno Rosado, no obtuvo ningún voto.
El mandato de Sánchez Soya se extenderá hasta el 6 de noviembre de 2029, marcando el inicio de una nueva etapa al frente de la CDHE, tras la finalización del periodo de Félix Cerezo Vélez.
Tras su designación, Sánchez Soya tomó protesta de su cargo y ofreció un mensaje a los medios. En su intervención, destacó que su labor será apartidista y abierta a todos los sectores de la sociedad. Asimismo, solicitó un voto de confianza tanto a los diputados como a la ciudadanía para demostrar su capacidad de trabajo.
En relación a posibles investigaciones sobre Cerezo Vélez, Sánchez Soya aclaró que no le corresponde emitir juicios al respecto, y destacó que serán las autoridades competentes las encargadas de investigar y esclarecer cualquier situación.
Sobre el elevado salario que percibe el titular de la CDHE, que asciende a 90 mil 979 pesos netos, señaló que no tiene previsto solicitar una reducción en dicho monto, pero aseguró que trabajará para que el salario se vea reflejado en resultados concretos.
Sánchez Soya, quien fue la aspirante mejor evaluada entre los 12 candidatos, tiene una sólida trayectoria en la defensa de los derechos humanos, con un enfoque particular en la protección de grupos vulnerables. Es abogada con 12 años de experiencia, cuenta con una licenciatura en Derecho por la Universidad del Valle de México, campus Puebla, y una maestría en Litigación de Juicios Orales.
ERA URGENTE LA RENOVACIÓN DE LA TITULARIDAD DE LA CDHE: ZATARAÍN
Previo a la designación de Sánchez Soya, el diputado Roberto Zataraín Leal subió a tribuna para destacar la urgencia de renovar la titularidad de la CDHE, señalando que la entidad atraviesa una grave crisis en materia de derechos humanos.
Zataraín expresó su preocupación por los altos índices de violaciones a los derechos fundamentales en el estado y cuestionó la eficiencia en el uso de los recursos asignados a la Comisión, durante la administración de Félix Cerezo.
Puebla, dijo, ocupa el cuarto lugar a nivel nacional en cuanto a quejas por violaciones a los derechos humanos, con un promedio de entre 25 y 30 quejas diarias. En este contexto, subrayó la paradoja de que, a pesar de ser el quinto estado con mayor población en el país, Puebla sigue estando entre los últimos lugares en cuanto a personal dedicado a la protección y defensa de los derechos humanos.
“Es preocupante que, a pesar de contar con uno de los presupuestos más altos para la Comisión Estatal de Derechos Humanos, con casi 60 millones de pesos anuales, en comparación con los 22 millones que se destinaban en 2019, no se ve un reflejo claro en la mejora de la atención y protección de los derechos humanos en el estado”, concluyó.
LUANA AMADOR VALLEJO CUESTIONA EL PROCESO DE ELECCIÓN
La diputada panista, Luana Armida Amador Vallejo, cuestionó el proceso de elección y el nombramiento de los dos finalistas para la presidencia de la CDHE. La legisladora señaló varias anomalías, comenzando por la falta de acceso a los currículums, lo que impidió un análisis adecuado y previo de los perfiles antes de las comparecencias.
También criticó el hecho de que solo se presentaran dos finalistas para el cargo de presidenta, sin que este mecanismo surgiera de una propuesta ni discusión dentro de la propia Comisión.
Afirmó que su grupo legislativo decidió no avalar a ninguno de los dos finalistas presentados para la presidencia de la Comisión. Hizo un llamado a la nueva titular para que no esté sujeta a los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial, garantizando así su imparcialidad y autonomía frente a presiones externas.