1. No crea usted en los pesimistas y en los agoreros de la izquierda morenista. No lea noticias, ni posts ni periódicos (¿todavía existen esas nostalgias del siglo veinte?) ni tuits que lo incomoden. Lea la prensa de Estados Unidos o noticias de España, países donde la izquierda anda muy deslavada.
2. Vuelva a inflar las encuestas infladas que su partido de marras difundió en la pasada elección estatal y federal. Total, la gente ya las olvidó. Los jefes de información necesitan con qué completar la página 35 del PDF. Los lectores requieren lecturas edificantes. Total, ya nadie lee la vitrina metodológica de la encuesta. Edifique su espíritu; lea la Biblia, El grado Cero de la Escritura o alguna página de prosa bizantina del Hipócrita Lector.
3. Vuelva a su partido de oposición, digamos una nueva corriente de Morena. Por ejemplo, si su partido de oposición era azulito puede usted crear la corriente de oposición “Azul guinda”. Si su partido de oposición era tricolor puede usted crear su partido de oposición “Tricolor Guinda”.
4. Invente consignas de la derecha guinda. Por ejemplo, “Por el bien de todos, primero los empresarios”. “Por el bien de todos primero los ricachones”, “Por el bien de todos, primero las licitaciones”.
5. Repita las consignas que le permitirán desintoxicarse ideológicamente.
Por ejemplo: “Zedillo fue un gran presidente de la República”, “Porfirio
Díaz, aunque estuvo muchos años en el poder, modernizó al país”, “La
revolución mexicana provocó caos y detuvo el progreso de México”, “No
hubo fraude electoral en el 2006”.
6. Regrese al paso 5 y haga unos tiktoks.
7. Si es usted de un partido de oposición recuerde que el pasado siempre fue mejor, repítalo mil veces cada vez que alguien le hable de la Reforma Judicial, de la Soberanía energética o de las becas Benito Juárez.
8. Jure y perjure que la monarquía española es la solución de todos los problemas de México. Nadie lo refutará, todos sus amigos pro-monárquicos lo aplaudirán. Saque su yelmo y pronuncie que la Conquista de México es una invención “woke”.
9. Jure y perjure que la “Tierra es plana”. Cree un partido de oposición que acuse a la izquierda morenista de impedirle expresar su ideología. “¡Los comunistas se oponen a los que defendemos que la tierra es plana!”
10. Si de plano se siente muy alicaído, o alicaída, o depre, saque su colección de videos “Andrés Manuel es un peligro para México”, dese un baño de fragancias aromáticas, ocupe un sahumerio y ponga algún programa de Televisa de los años noventa, una telenovela por favor, para entonarse con el habitus cultural, recuerde esos años fabulosos del Fobaproa, de la Matanza de Aguas Blancas, la tesis del asesino solitario en Lomas Taurinas, y repita, uff, Jacobo Zabludowsky sí sabía de periodismo.
