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domingo, noviembre 24, 2024

Pueblos Mágicos: comunidad consumible

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Desde hace algunos años la noción de Pueblo Mágico en México ha generado una importante divulgación entre ciertos sectores sociales. 

Cada vez más se escucha en espacios culturales y políticos, la recurrente etiqueta de Pueblo Mágico cuando se pretende establecer una relación locativa entre lo que representaría, en el imaginario colectivo, un pueblo con difusión turística o un pueblo sin plusvalía. 

Los Pueblos Mágicos son un programa turístico que fue implementado desde el año 2001 y desarrollado por la Secretaría de Turismo. Una de las características imprescindibles que existen para reconocer un Pueblo Mágico es el atributo simbólico, la capacidad de tradición oral como son las leyendas, la historia, hechos históricos y trascendentales y la capacidad de generar turismo a partir de las manifestaciones culturales. [Consultado en http://www.sectur.gob.mx/gobmx/pueblos-magicos/ 2014-SECTUR]. 

Como mencionan González-Fuentes y Salas (2021), las dinámicas de acumulación del capital, y en este caso por medio del turismo, generan un debilitamiento de las formas de vida cotidiana y el fortalecimiento de dinámicas asociadas al consumo efímero. 

El presente texto pretende justificar cómo los Pueblos Mágicos, indirectamente o con un discurso tendencioso actúan como proyectos socio-espaciales para la implementación sagaz de la globalización económica, mercantilización del patrimonio cultural, privatización y artificialización de la vida cotidiana con fines turísticos y con el matiz de la generación de espacios de consumo. 

Esencialmente estamos sumergidos en un escenario tambaleante de los conceptos que rodean la comunidad, los pueblos y la cultura. Siendo, el concepto de “cultura” tan abstracto e inexacto en su comprensión concreta. Los conceptos que rodean esta idea son manipulados en la mayoría de los casos. 

Según el manual de Patrimonio de la UNESCO (UNESCO CULTURE FOR DEVELOPMENT INDICATORS. P.134); el patrimonio es considerado: 

“i) los monumentos: obras arquitectónicas, de escultura o de pintura monumentales, elementos o estructuras de carácter arqueológico, inscripciones, cavernas y grupos de elementos, que tengan un valor universal excepcional desde el punto de vista de la historia, del arte o de la ciencia; ii) los conjuntos: grupos de construcciones, aisladas o reunidas, cuya arquitectura, unidad e integración en el paisaje les dé un valor universal excepcional desde el punto de vista de la historia, del arte o de la ciencia; iii) los lugares: obras del hombre u obras conjuntas del hombre y la naturaleza, así como las zonas, incluidos los lugares arqueológicos, que tengan un valor universal excepcional desde el punto de vista histórico, estético, etnológico o antropológico”. 

Pero cada vez es más evidente que los discursos políticos y culturales consideran capital cultural al patrimonio tanto tangible como intangible. Esta idea o perspectiva representa una amenaza para las comunidades indígenas en México y para el patrimonio cultural material e inmaterial. Debido a que en el caso de los Pueblos Mágicos es evidente la transformación del espacio para acumulación del capital.  

Durante los años 2001-2018 se fortaleció la difusión del concepto de Pueblos Mágicos en México y se incentivó por medio de recursos federales la conversión de espacios comunitarios fuertemente identificados por la potencia cultural, fomentando la segregación socioespacial, el consumo del espacio (turistificación de espacios naturales como ríos, lagunas, cascadas, etc.…). Y en algunos casos provocando gentrificación en las zonas comunitarias, como es el caso de Cholula y la compra-venta de terrenos para la potencialización del turismo en la zona arqueológica. 

Los espacios turistificados de los Pueblos Mágicos deben satisfacer necesidades de alojamiento, alimentación y actividades culturales monetizadas, esto quiere decir; la generación de proyectos donde se promueve la teatralización de la cultura para consumo turístico, lo cual banaliza los atributos simbólicos y proyecta escenarios de desplazamiento simbólico sutiles y nocivos dentro del contexto cultural. Ya que, los pobladores (niños) se acostumbran a convivir con un escenario de consumo cultural.  

Un ejemplo claro puede ser descrito al observar a los niños de las comunidades convertidas en consumidades relatando las leyendas sintetizadas del pueblo a cambio de dinero.  

En el caso de Huauchinango, en la Sierra Norte de Puebla. La atribución como Pueblo Mágico ha desencadenado escenarios discretos de desigualdad en los espacios que anteriormente eran locales, como es el caso de la Feria de Las Flores en el recinto ferial Municipal, donde se podía observar a las mujeres artesanas vendiendo los textiles de las comunidades aledañas pertenecientes al Municipio.  

Después de la atribución de Pueblo Mágico los intermediarios han dirigido las ventas de dichas prendas y generado, bajo un discurso tendencioso, el apoyo a la difusión cultural y simbólica de los textiles indígenas. Pequeños empresarios ahora fungen como representantes e intermediarios entre los artesanos y el nuevo turismo nacional e internacional que poco a poco se involucra en las dinámicas comerciales de la comunidad-consumidad 

 

SEGUNDA PARTE  

La región de Huauchinango ha tenido procesos de desplazamiento cultural en determinadas situaciones a lo largo de la historia (Mejía, S. 1971), pero la readaptación cultural y los mecanismos de defensa que las culturas aledañas (nahuas, ñahñu, tujtujnacu y tepehuas) desempeñaban, mantenían la identidad por medio de estrategias culturales de contacto.  

Hasta principios del siglo XXI, una de las prácticas culturales más importantes para los habitantes de Huauchinango era el Tianguis que todos los sábados se presentaba en el primer cuadrante del Centro Histórico, pero fue desplazado a una plaza construida a más de 6 calles del primer cuadrante debido a la congestión y aglomeración que se generaba en el espacio público. Donde eran cerradas más de 10 calles para el tráfico comercial de tipo cultural que representa una tradición importante para las dinámicas culturales de contacto en la zona. 

Este caso representa un ejemplo de desplazamiento simbólico, cultural y espacial por medio del tianguis; una de las actividades culturales más importantes para las culturas mesoamericanas como centro irradiador de comunicación, contacto cultural y trueque. (Villegas, P. 2010) 

Como conclusión podemos asegurar que cada uno de los casos que envuelven el concepto de Pueblo Mágico y las dinámicas intrínsecas de turistificación, mercantilización, banalización cultural, acumulación, desposesión, gentrificación y daños ecológicos con la entrada del turismo, representan una amenaza. 

El concepto de Pueblos Mágicos representa un pretexto para la intervención de las dinámicas capitalistas y extractivistas en las zonas con mayor patrimonio cultural material e inmaterial. Desde desplazamiento simbólico hasta desplazamiento territorial.  

Si bien, el título de Pueblo Mágico representa la riqueza cultural de un municipio. Si esa es la fachada del concepto, ¿por qué se perjudica de manera directa a la cultura y las tradiciones?, entonces ¿cuál sería la verdadera intención de nombrar un Pueblo Mágico?  

Desde el año 2019 en los medios de comunicación representó un escándalo el recorte presupuestal que se hizo a los Pueblos Mágicos. ¿Pero dónde están los medios cuando las dinámicas turísticas perjudican la cultura de manera irreparable?  

 

BIBLIOGRAFÍA 

González-Fuente, I, Salas, H. (2021). Fragmentar, descolectivizar, acumular. Surgimiento y desarrollo de la consumidad de Val’Quirico, México. En Antropología Experimental. Universidad de Jaén (España) ISSN: 1578-4282 Deposito legal: J-154-200 

Mejía Castelán Sandalio. Huauchinango Histórico. Síntesis estadística y geográfica del Distrito de Huauchinango, en el estado de Puebla, con datos hasta el año de 1945.  México, Puebla. Ed. Cajica, 1945. 

Mejía Castelán Sandalio. Monografía de Necaxa 1971. México, Puebla: Impresos Aries. 

Trejo, V. (2006). Cacicazgos y Arriería del siglo XIX. Rafael Cravioto y la Sierra de Puebla, México, D.F: Universidad Iberoamericana 

UNESCO CULTURE FOR DEVELOPMENT INDICATORS. Manual de Patrimonio. p.134 

Villegas, P. (2010). Del tianguis prehispánico al tianguis colonial: Lugar de intercambio y predicación (siglo XVI), México. Estudios Mesoameticanos: Nueva Época. 

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