En el pasado proceso electoral del 2 de junio si hubo un partido que irrumpió en el escenario nacional ese fue sin duda alguna Movimiento Ciudadano, que después de la fallida candidatura del gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda (fosfo – fosfo), propusieron como su abanderado a Jorge Álvarez Máynez, quien resultó una novedad electoral entre los sectores jóvenes y universitarios.
Se han escrito varias líneas de análisis sobre la campaña electoral que jugó MC y Máynez, desde la banalización de la política hasta su colaboración con Claudia Sheinbaum, la candidata de Morena.
Pero lo cierto fue que, ante un electorado volátil entre algunos segmentos sociales, el perfil y la imagen “joven”, junto con los promocionales musicales le dejaron una gran ganancia en votos a esta franquicia partidaria.
Dicha organización tiene apenas 24 años de existencia en el escenario nacional, se inició en 1999 como Convergencia por la Democracia, después se convirtieron solo en Convergencia, hoy son Movimiento Ciudadano (MC).
Es un partido vertical, con normas internas de control político que evita divisiones y confrontaciones, por cierto, no han tenido hasta la fecha este tipo de situaciones, salvo las críticas del gobernador de Jalisco. Bueno, sus métodos para elegir a sus dirigentes tampoco son muy democráticos que digamos, Dante Delgado es su fundador y quien lo coordina nacionalmente desde hace años.
Por así decirlo, ha dejado de ser un partido–arrecife para convertirse en una fuerza electoral en proceso de consolidación en el país y, comparados con el PRI y PAN, son relativamente nuevos.
Con una definición ideológica de centro, también actúan como péndulo, que les ha posibilitado ir de un lado a otro, sus alianzas son parte de ello. Desde el 2000 hasta el 2018 formalizaron alianzas con la llamada izquierda y luego lo hicieron con la derecha, en Puebla se aliaron en el 2010.
Movimiento ciudadano se convirtió muy pronto en un partido competitivo y atractivo para sectores diversos, nuevos y neutros, lo mismo que para miembros de otros institutos, diríamos que no forman sus propios cuadros, siempre se nutren y abastecen constantemente de ciudadanos.
Ahora veamos un poco de su evolución electoral tanto a nivel nacional como local (Puebla): en el proceso federal del 2000 participaron por primera vez con la Alianza por México, que postuló en su tercer intento al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, junto con el PRD, PT y PAS entre otro más; lograron juntos 6 millones 256 mil 780 votos. Mientras que en Puebla obtuvo la misma alianza 208,688 votos.
En esas elecciones se daría por primera vez la alternancia en el poder y ganaría Vicente Fox Quesada.
En los tan cuestionados comicios del 2006 volvería hacer alianzas electorales y empezaría a conquistar más espacios legislativos, centrando su fuerza en Veracruz, Oaxaca y Estado de México, logrando cinco diputaciones de mayoría relativa; 11 de representación proporcional y dos senadores por vía plurinominal.
Para el 2012, otra vez en alianza, lograron en conjunto 15 millones 535,117 votos, como partido aportaron: 2 millones,078,888 sufragios, obteniendo 17 diputaciones de representación proporcional y un senador. En Puebla, solos, aportaron 120 mil 976 votos, con el 4.23 por ciento y convirtiéndose en la sexta fuerza política a nivel nacional.
En el proceso del 2018 participaron en alianza con el PAN y PRD, sumando como partido 1 millón 010, 891 votos. A nivel nacional lograron 29 diputados federales y dos senadurías. En los comicios locales del mismo año, MC obtendría 92 mil 674 votos, el 3.24 por ciento, cinco municipios y un diputado de representación proporcional. En el concurrente local del 2021, ganan 11 municipios y un diputado de representación proporcional.
Para este proceso del 2024 participaron por primera con candidato propio (Álvarez Máynez), obteniendo 6 millones 204,710 votos y el 10.32 por ciento. Logrando como MC un poco más de 5 millones en relación con el 2018. Ganaron dos diputaciones de mayoría relativa y 24 de representación proporcional, además dos senadurías como primera minoría y cuatro de lista nacional. Puebla le aportó a Máynez 332, 071 votos.
Como partido político sacaron más votos que el PRI, PVEM y PT, convirtiéndose en la tercera fuerza nacional. En estados como Jalisco, Nuevo León, Estado de México, CDMX, Guanajuato y Puebla se concentró una buena parte de su votación.
Finalmente, y sobre los resultados en las elecciones locales para gobernador (Puebla), MC obtuvo 140 mil 077 sufragios, con el 4.38 por ciento de la votación y mantuvo su registro local. Lograron ganar en 10 municipios y dos diputados de representación proporcional. Las zonas en donde se incrementó su presencia fueron Ciudad de Puebla, C. Serdán, Huejotzingo, San Martín Texmelucan, Huauchinango, entre otras.
Conclusión: El capital político–electoral que han logrado es interesante, como partido veremos si logran consolidarlo y mantienen su crecimiento. Es obvio que deberán definir su rumbo político y hacer reformas internas para abrirlo a los ciudadanos.
Representaron una novedosa alternativa ante los sectores jóvenes y la clase media, ahora tienen que demostrar que son una opción a futuro, con un proyecto definido ante el desgaste de los partidos tradicionales y diferenciarse de Morena.
Posdata: Junto con Lupillo tuvimos la oportunidad de conocer hace algunos años al diputado Carlos Navarro Corro, un mixteco que le gustaba hacer política. Descanse en paz.