Tras verse acorralado por la difusión de una invitación a un desayuno convocado para consejeros estatales del PAN que podrían incidir en su unción como líder del partido, Adán Domínguez Sánchez justificó esta treta de varias maneras: que el proceso de selección del nuevo dirigente aún no ha iniciado, que se trataba de una reunión como “muchas otras” y que el único propósito era anunciar los “logros” de su administración y la de su jefe político y socio comercial, Eduardo Rivera.
Días antes, para los cuadros panistas que forman parte de dicho Consejo, sonaba extraño que en tres años de administración jamás recibieron una invitación para tener noticias sobre un presunto informe, y que en esta ocasión ocurriera en medio de un proceso de renovación de la dirigencia de su partido.
Aún con las suspicacias a cuestas, Domínguez Sánchez se paró frente al micrófono y pronunció: “La reunión no tiene nada que ver con la dirigencia estatal del partido, es más, no hay un proceso abierto de la dirigencia estatal del partido. Quienes especulan al respecto lo hacen en un mero tema de dichos”.
El edil suplente aseguró que esta reunión se trataba de “muchas otras que hubo” a lo largo de la administración, además dijo que la intención era brindar detalles de los trabajos realizados en los primeros 6 meses de 2024 y los años previos bajo la gestión de Eduardo Rivera, lo que contrastó con lo que dicta la Ley Orgánica municipal, acerca de la periodicidad para brindar estos informes de resultados.
Domínguez manifestó que por el momento sigue concentrado en su trabajo como alcalde de Puebla y que esperaría a terminar su periodo para pensar en su futuro político, de ahí que rechazó que la reunión tuviera fines partidistas.
Además, aseguró que presuntamente, estas reuniones se han llevado a cabo con otros sectores como empresarios, universitarios y líderes de la sociedad civil.
Aunque el edil sostuvo que el proceso de renovación interna del PAN aún no ha iniciado, -de ahí que desestimó que se trate de una reunión política- esto no le había impedido pronunciarse previamente por este tema.
El pasado 26 de junio, Adán Domínguez Sánchez utilizó un evento oficial, el “Rally por la Paz” en la secundaria federal No. 5 “Jesús Romero Flores”, para manifestar las tensiones internas en el PAN respecto a la sucesión de la dirigencia estatal del partido.
Durante el evento, Domínguez criticó a la diputada local del PAN, Mónica Rodríguez Della Vecchia, señalando su “falta” de acciones visibles en la Comisión de la Familia y la Niñez y cuestionando su compromiso tras declinar una candidatura como diputada federal.
Lo peor: para sustentar sus acusaciones, utilizó a un grupo de menores de entre 12 y 15 años, a quienes cuestionó si alguna vez habían escuchado sobre el trabajo de la Comisión y de su presidenta en el Congreso.
Este ataque reflejó las fricciones entre los seguidores de Eduardo Rivera Pérez y los críticos de su gestión, como Rodríguez y Rafael Micalco Méndez, coordinador del PAN en el Congreso, quien lamentó las declaraciones del alcalde y defendió la labor legislativa de su compañera.
Esta no fue la primera vez que Adán Domínguez usó un evento de gobierno como trampolín para ganar cámara.
Dos días antes de este incidente, destapó sus aspiraciones para contender por la dirigencia estatal de su partido, sumando más críticas hacia perfiles que han sido contrapeso a los intereses del Yunque en el estado.
Lo anterior dio lugar a que el pasado 2 de julio, Enrique Guevara Montiel, secretario Particular de Presidencia del Ayuntamiento, convocó a consejeros estatales del PAN a un desayuno en el Hotel Quinta Real, programado para el 6 de julio.
La reunión, presentada formalmente para discutir logros municipales, tenía como verdadero objetivo influir en la elección del nuevo dirigente estatal del partido, favoreciendo al exalcalde Eduardo Rivera Pérez o a su aliado, el actual presidente municipal Adán Domínguez Sánchez.
La estrategia ha suscitado polémica debido al uso de recursos municipales para fines partidistas y presiones internas para obtener apoyo. Esto sigue a tácticas previas del grupo para asegurar la elección de sus candidatos a través del Consejo Estatal del PAN, incluyendo ofertas de puestos laborales y contratos de obra pública.
