Durante el primer año de gobierno de Alejandro Armenta, el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF) extendió su infraestructura social y programas de alimentación a los 217 municipios de Puebla, mediante acciones coordinadas en las 27 microrregiones del estado, en beneficio de miles de personas en situación de vulnerabilidad.
A través de la entrega de despensas, desayunos escolares y el fortalecimiento de obras comunitarias, el SEDIF Puebla canalizó apoyos de equipamiento, alimentación y desarrollo social, consolidando una política de atención directa a las comunidades que más lo requieren.
El titular de la Dirección de Delegaciones del SEDIF, Rigoberto Ortiz Osorio, destacó que, por indicación de la presidenta del Patronato, Ceci Arellano, las y los delegados en las 27 microrregiones son el primer contacto de apoyo para los grupos vulnerables, con el objetivo de impulsar familias fuertes y emprendedoras.
Explicó que los beneficios otorgados se enfocaron en el equipamiento y reequipamiento de espacios como Desayunadores, Centros de Capacitación y Desarrollo, Estancias de Día y Centros de Rehabilitación Integral, además de la dispersión de despensas y desayunos escolares en modalidades fría y caliente para 17 mil 721 niñas, niños y adolescentes.
Entre los principales apoyos otorgados durante este periodo, sobresalen las obras comunitarias, con una inversión global de 64 millones 965 mil 799 pesos, que se tradujo en más de 680 acciones destinadas a mejorar la calidad de vida de los habitantes de los 217 municipios del estado.

Asimismo, se entregaron un millón 130 mil despensas correspondientes al programa de Atención Alimentaria en los Primeros 1000 Días, así como del programa de Atención a Grupos Vulnerables, beneficiando a 703 mil personas en todo el territorio poblano. A ello se suma la entrega constante de desayunos escolares en sus distintas modalidades.
Con una visión humanista, sensible y cercana a la gente, el SEDIF Puebla llevó a cabo estas acciones en coordinación con el Gobierno de México, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, reafirmando el compromiso de ser una administración de territorio y no de escritorio, enfocada en el bienestar social y la atención directa a quienes más lo necesitan.

