El gobernador Miguel Barbosa Huerta le recordó a la exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco, que hay que ser auténticamente obradorista actuando con honradez, luego de que la morenista desdeñó participar en la marcha de este domingo y sostuvo que su respaldo absoluto está con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El mandatario indicó que cualquier opinión fue rebasada por la magnitud de la marcha de este domingo en defensa de la Cuarta Transformación, que logró reunir a alrededor de cien mil personas provenientes de todo el estado.
En su conferencia de prensa, Miguel Barbosa refirió que no existe duda del obradorismo que profesan incluso aquellos que no participaron en la manifestación de ayer, pero dijo que hay que ser auténticamente obradoristas.
“El tema del apoyo a la Cuarta Transformación es un tema que nos involucra a todos, yo no tengo dudas de que gentes que no estuvieron en la marcha sean auténticamente obradoristas, solamente que hay que ser auténticamente obradoristas cuando con honradez, solamente así hay que acreditarlo”, indicó.
La expresidenta municipal de Puebla -una de las peores evaluadas durante su gestión- publicó en sus redes sociales un mensaje de respaldo “absoluto” al presidente, no obstante desdeñó la marcha en respaldo hacia su gobierno.
“La marcha de ayer es un hecho político que rebasa y vence cualquier opinión diferente a lo ocurrido. Les recomiendo que mejor se silencien, se silencien para no cometer errores frente a un acontecimiento de este tamaño, de este nivel”, expresó Barbosa Huerta.
La exalcaldesa de Morena intentó reelegirse en el pasado proceso electoral pero fue arrasada por el panista Eduardo Rivera Pérez, actual alcalde de la capital poblana. De acuerdo con una encuesta de Mitofsky, fue la segunda peor alcaldesa del país durante su gestión.
La Auditoría Superior del Estado (ASE) detectó irregularidades en su gestión, al advertir un posible daño patrimonial por 822 millones de pesos, correspondientes a la cuenta pública del ejercicio 2022.
Entre las irregularidades se encuentran sobrecostos en obras y contratos, así como anomalías en la compra de ventiladores y otros insumos utilizados durante la pandemia de la Covid-19.
