Tras ser exhibidos por la falta de regulación de establecimientos comerciales que venden bebidas alcohólicas a menores de edad en sitios como mercados, tianguis y salones sociales, el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez reconoció que su equipo de regidores, junto a burócratas de la Comuna, alistan modificaciones al Código Reglamentario Municipal (Coremun) para sancionar y clausurar a establecimientos que realicen estas prácticas en flagrancia.
La iniciativa, dijo, estará lista esta semana, es decir, a casi un mes de distancia desde que el Ayuntamiento de Puebla fue centro de críticas por haber sido omiso en la clausura del salón social Country de San Manuel, donde a inicios de noviembre más de una decena de estudiantes de la BUAP resultaron intoxicados por el consumo de alcohol presuntamente adulterado.
Ayer, el munícipe indicó que con estas reformas, la Comuna tendría mayores atribuciones para clausurar negocios como salones sociales ante la venta desmedida de bebidas alcohólicas a menores de edad, toda vez que hasta el momento el argumento utilizado para no clausurar ha sido la falta de facultades.
“Lo que queremos es ampliar las facultades del gobierno de la ciudad para que en caso de que un particular permita en un lugar que se rente, que se venden bebidas alcohólicas o que se distribuya alcohol a menores de edad; que estas facultades puedan ser ampliadas al gobierno de la ciudad para cuando un salón permita este tipo de actividades pueda ser sancionado. Espero que en el transcurso de esta semana puedan los regidores darlo a conocer y posteriormente ser aprobado”, dijo.
Desde ocurrido el incidente en el que los estudiantes de la BUAP resultaron intoxicados, el edil calificó como “especulaciones” el que los organizadores -Cabrito´s Social Group- hayan vendido bebidas alcohólicas adulteradas a los menores de edad e inclusive dejó la responsabilidad a los padres de familia, a quienes exhortó el verificar “en dónde están sus hijos”.
La culpa también la repartió a la Secretaría de Salud estatal, al señalar que les corresponde a ellos imponer sanciones a los establecimientos que venden este tipo de productos adulterados, mas no el municipio de Puebla, supuestamente al no tener facultades.
Ante la amonestación pública del gobernador Miguel Barbosa Huerta por ser omisos en regular las actividades en el salón social de San Manuel, el panista se dijo a favor de que sea el gobierno del estado el que impulse reformas al Coremun y a la Ley Orgánica municipal, para evitar más incidentes de este tipo y sean clausurados los establecimientos que vendan alcohol adulterado.
Sin embargo, desde entonces, en redes sociales se han exhibido más negocios que venden bebidas alcohólicas sin licencias de funcionamiento en colonias como el Centro Histórico, Granjas de San Isidro o Balcones del Sur, juntas auxiliares como La Resurrección, hasta en mercados y tianguis donde la venta de micheladas abunda a plena luz del día.
