A un año desde la explosión en la junta auxiliar de San Pablo Xochimehuacan que dejó un saldo de seis personas fallecidas y decenas de viviendas dañadas, el alcalde Eduardo Rivera Pérez reconoció que el problema de huachicol sigue ocurriendo en la ciudad.
El munícipe aseguró que el gobierno federal, Petróleos Mexicanos (PEMEX), y el Ejército deben continuar con la estrategia de robo de hidrocarburos, sin embargo, no explicó de manera precisa cuáles han sido las acciones que han hecho desde el gobierno municipal.
Únicamente aseguró que la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) está alerta de que ante cualquier sospecha de alguna ordeña de ductos, atiendan el reporte para evitar cualquier tragedia.
Rivera Pérez justificó que si en el norte del municipio se encuentran muchas viviendas asentadas sobre zona de riesgo, es debido al crecimiento de la mancha urbana de la ciudad.
Fue el 31 de octubre de 2021 cuando se registró una explosión en San Pablo Xochimehuacan a causa de una fuga en una toma clandestina de gas LP.
La explosión dejó en su momento un saldo de seis fallecidos, 11 lesionados, 2 mil personas evacuadas y hasta 60 casas dañadas, además de que hay siete detenidos el 7 de diciembre de ese mismo año.