El pasado lunes 12 de septiembre, la presidenta municipal de San Martín Texmelucan, Norma Layón Aarún, y los directivos de las empresas proveedoras Global Denim y Rassini Frenos, inauguraron con bombo y platillo la rehabilitación de un tanque de agua elevado en la junta auxiliar de San Baltazar Temaxcalac.
La obra vino acompañada del festejo y de presumir una inversión de 2.3 millones de pesos que salieron del Fondo de Infraestructura Social Municipal, así como contribuciones de las dos empresas proveedoras para beneficiar a 6 mil habitantes.
Apenas pasaron 48 horas cuando el sitio fue el centro de la tragedia. El tanque colapsó y provocó la muerte de dos personas, además de que una más resultó lesionada y fue trasladada al hospital integral más cercano.
La desgracia se conoció de manera inmediata, ya que a través de redes sociales la noticia se volvió viral en unos pocos minutos. Los medios de comunicación nacional tomaron la nota en sus noticiarios de mediodía. El escándalo explotó y nadie pudo hacer nada para contrarrestarlo.
El problema se radicalizó y al cabo de unas horas, cuando la alcaldesa se apersonó en el sitio e intentó dialogar con los deudos para encontrar una solución, los habitantes fueron azuzados por el presidente auxiliar, Miguel Cante Pérez, a fin de correrla con sus escoltas y los elementos de la policía estatal que testificaban el encuentro.
Palos, piedras, botellas de agua y toda clase de objetos fueron dirigidos a la morenista y su equipo en medio de gritos y el enfado colectivo, por lo que de inmediato tuvieron que abandonar el lugar con evidente premura, con el riesgo de sufrir un linchamiento debido a que los pobladores los superaban en número.
El Ayuntamiento de San Martín Texmelucan emitió una postura oficial basada en que colaborarán con la Fiscalía General del Estado (FGE) para determinar responsabilidades; además, revisarán el contrato de obra pública y presentarán denuncias, en caso de que las diligencias así lo determinen.
-Video de Violeta García
RECUENTO DE LA TRAGEDIA
Eran aproximadamente las 11:00 horas de este miércoles. En pleno corazón de la junta auxiliar de San Baltazar Temaxcalac, los pobladores paseaban cerca del tanque de agua elevado que dos días atrás inauguró la presidenta municipal reelecta, Norma Layón Aarún.
Un estruendo se escuchó en la cima, pero nadie pudo alertar lo sucedido. En cuestión de segundos, pedazos de estructuras metálicas cayeron de lo alto sobre las personas que transitaban en la zona: dos personas murieron al instante y una más alcanzó a sobrevivir, pero con lesiones que hasta la fecha no se han dado a conocer.
Tras la tragedia, personas que atestiguaron el desplome comenzaron a retirar escombros para ayudar a las víctimas. Minutos después, personal de Protección Civil y de la Cruz Roja iniciaron las labores de rescate, aunque el incidente ya había cobrado factura de inmediato con la pérdida de vidas humanas.
Aunque el Ayuntamiento de San Martín Texmelucan ya había difundido un comunicado a través de sus canales oficiales, en el que aludía a que se iniciaran investigaciones desde la Fiscalía General del Estado para esclarecer los hechos, Norma Layón acudió al lugar del incidente para dialogar con las familias afectadas.
Durante el diálogo con los pobladores, la alcaldesa dirigió unas palabras a los medios de información en las que dejó abierta la posibilidad de que el suceso se haya tratado de un acto provocado o negligencia por parte de la empresa contratista.
“Los dictámenes están al 100 por ciento, valorados y desde luego rectificados y ratificados para que esto obviamente no suceda. No es un hecho que provocamos nosotros, es un hecho lamentable y como Ayuntamiento vamos a ayudar”, sostuvo.
Pero poco duró la presencia de Layón Aarún en la comunidad. Fuentes cercanas a este medio confiaron que el presidente auxiliar, Miguel Cante Pérez, incitó a los pobladores a iniciar una gresca contra la presidenta.
Entonces se calentaron los ánimos: jaloneos, agresiones físicas y verbales comenzaron a ser dirigidas a la escolta que acompañaba a la presidenta municipal, mientras intentaban abrirse paso entre la multitud para huir del sitio.
A bordo de una camioneta Chevrolet Suburban blindada color negro, fue retirada la morenista del sitio, en medio de piedras que eran lanzadas por la población enardecida.
Un tabique incluso logró atravesar el espejo trasero de un vehículo de menor dimensión, mientras el conductor intentaba repeler las piedras que le eran arrojadas a la par que abrían las puertas del vehículo, según se aprecia en los videos difundidos.
INVIERTEN 2.3MDP EN TANQUE ELEVADO
Dos días antes del altercado, la alcaldesa Norma Layón cortaba el listón de la entrega de la obra de 2.3 millones de pesos que fue ejecutada con recursos del FISM y la coparticipación de las compañías Global Denim y Rassini Frenos, cuyos representantes son David Troice Jalife y Héctor Galván Venegas, respectivamente.
La obra de rehabilitación se programó luego de que, presuntamente, el tanque de agua con antigüedad de 40 años había sido vandalizado por el edil auxiliar anterior, motivo por el que requería una intervención inmediata, a pesar de la resistencia de un grupo de personas que quería que la inversión se dirigiera para otras obras prioritarias.
A decir de testimonios, la junta auxiliar de San Baltazar Temaxcalac se ha tornado en una zona conflictiva, motivo por el que no sorprendió la reacción de los pobladores ante el accidente que dejó a dos personas fallecidas.
De acuerdo con los resultados de búsqueda, David Troice Jalife, representante de Global Denim, es también vicepresidente de Estrategia para el Fortalecimiento de la Cadena Textil y confección en la Cámara Nacional de la Industria Textil (Canaintex).
En tanto, según la página de internet de Global Denim, se trata de una compañía mexicana fundada en 1994 que se especializa en la fabricación de mezclilla que tiene “presencia fuerte en mercados internacionales y domésticos”.
EVIDENTE AGRESIÓN
Fuentes cercanas a este medio confiaron que el presidente auxiliar, Miguel Cante Pérez, incitó a los pobladores a iniciar una gresca contra la presidenta. Entonces que se calentaron los ánimos: jaloneos, agresiones físicas y verbales comenzaron a ser dirigidas a la escolta que acompañaba a la presidenta municipal, mientras intentaban abrirse paso entre la multitud para huir del sitio.
