El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, lanzó un mensaje a su gabinete y a los gobiernos municipales: los servidores públicos deben atender a la población, por lo que ningún funcionario tiene derecho a ignorar a la ciudadanía.
El mandatario poblano señaló que, ante la cantidad de reportes ciudadanos que recibe directamente en su teléfono y a través de redes sociales, en ocasiones parece más bien “encargado de servicios públicos” que gobernador.
“Yo parezco encargado de servicios públicos del ayuntamiento de Puebla. Y no solo del Ayuntamiento de Puebla, de los 217 municipios. A ver si me dan un nombramiento de supervisor de servicios públicos, porque a donde voy y encuentro un bache, le digo a mi secretario particular ‘háblale al presidente municipal’. No hay una lámpara en la noche, veo una montonera de basura, les digo ‘oigan, ¿qué pasó? ¿Por qué no la recogen?’”, expresó.
El gobernador dejó claro que los servidores públicos que se fastidien de atender llamadas, escuchar quejas o recibir denuncias simplemente “deben cambiar de trabajo”.
Reiteró que, para él, la política tiene como función principal la atención permanente al pueblo y recordó que su estilo es revisar personalmente los reportes ciudadanos: “Si yo puedo contestar un mensaje de WhatsApp o una llamada, ¿por qué un funcionario no puede hacerlo?”, cuestionó.
Alejandro Armenta también alertó sobre una de las principales causas de homicidios en Puebla, después de los accidentes en motocicleta: las riñas.
Explicó que, al calor del alcohol y en medio de fiestas patronales, partidos de fútbol o convivencias, se reavivan rencillas antiguas y enemistades que derivan en violencia. Aclaró que no se trata de justificar los hechos, sino de advertir a la población sobre la importancia de prevenir y denunciar.
El mandatario hizo un llamado directo a los poblanos para que reporten irregularidades, particularmente los casos de extorsión que afectan a transportistas y comerciantes, lo que pueden hacer a los números de emergencia 089 o 911.
