El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, encabezó por primera vez la ceremonia del Grito de Independencia, en un acto que congregó a miles de poblanos en el Zócalo capitalino.
Desde el balcón principal del Palacio Municipal, el mandatario evocó a los héroes de la patria y lanzó arengas en honor a los pueblos originarios, las mujeres, los migrantes y al pueblo de México. También expresó un reconocimiento a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, a quien calificó como símbolo de la transformación nacional.
El evento inició alrededor de las 22:00 horas con la participación de la escolta del Ejército Mexicano y el izamiento de la bandera. Tras el tradicional toque de campana, el gobernador ondeó el lábaro patrio y cerró su discurso con vivas a la soberanía, la justicia y el bienestar del país.
Armenta estuvo acompañado por su esposa, Cecilia Arellano; el presidente municipal de Puebla, José “Pepe” Chedraui Budib; la presidenta del Congreso local, Laura Artemisa García Chávez; y otras autoridades estatales y municipales.
La noche se iluminó con un espectáculo de fuegos artificiales sobre el centro histórico y concluyó con un concierto gratuito de Julión Álvarez en el Paseo Bravo, que reunió a miles de asistentes.
Para garantizar la seguridad durante las celebraciones patrias, se desplegó un operativo especial que incluyó cierres viales, transporte nocturno y vigilancia en distintos puntos de la ciudad.
En su mensaje, el gobernador resaltó que la ceremonia es símbolo de unión y recordó que “la patria significa recuperar la soberanía y garantizar justicia y bienestar para todas y todos los mexicanos”.