El gobierno de Estados Unidos informó este domingo que el presidente ruso, Vladimir Putin, aceptó permitir que Ucrania reciba garantías de seguridad sólidas por parte de Washington y sus aliados europeos, además de comprometerse a no invadir nuevos territorios europeos.
El anuncio fue hecho por el enviado especial estadounidense, Steve Witkoff, quien participó en la cumbre entre Putin y el presidente Donald Trump, celebrada el pasado viernes en Alaska. Witkoff calificó los compromisos rusos como un “avance revolucionario”, aunque admitió que no se alcanzó un alto al fuego ni un acuerdo de paz definitivo.
“Se logró progreso en casi todos los puntos necesarios para un tratado, pero aún hay temas pendientes”, señaló el funcionario, quien destacó que Moscú aceptó que la protección para Ucrania se inspire en el artículo 5 de la OTAN, aunque sin incluirla formalmente en la alianza.
En Europa, varios líderes recibieron con cautela el anuncio y reiteraron que no aceptarán que Ucrania ceda territorio a cambio de paz. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenskiy, viajará este lunes a Washington para reunirse con Trump y con mandatarios europeos en busca de asegurar que cualquier pacto respete la soberanía de Kiev.
Mientras tanto, la Casa Blanca celebró la disposición de Putin a abrir la puerta a un esquema de seguridad internacional para Ucrania, pero advirtió que el proceso aún se encuentra en una etapa preliminar.
Aunque el encuentro en Alaska no produjo un acuerdo formal, el compromiso de Rusia de no ampliar la guerra en Europa y de aceptar garantías de seguridad para Ucrania marca, según Washington, un cambio significativo en la postura de Moscú tras más de tres años de invasión.