La Universidad Politécnica de Tulancingo (UPT) se encuentra en el centro de una controversia legal tras un incidente ocurrido el 25 de julio, cuando un alumno agredió físicamente al profesor Ángel Ramírez Montiel durante una clase. El hecho, captado en video y difundido en redes sociales, ha generado diversas reacciones y acciones legales por ambas partes involucradas.
El alumno, identificado como Manuel “N”, argumentó que la agresión fue respuesta a burlas y acoso por parte del docente. Según su testimonio, a pesar de obtener calificaciones altas, el profesor lo marginaba y hacía comentarios despectivos durante las clases. Ante la falta de atención a sus denuncias previas, Manuel “N” decidió actuar de esta manera.
Por su parte, el profesor Ángel Ramírez Montiel también presentó una denuncia por lesiones en su contra. El Sindicato Único de Trabajadores de la UPT (SUTUPOT) ha expresado su preocupación por el proceso de baja definitiva del docente, señalando irregularidades en el procedimiento y la falta de oportunidad para su defensa legal. El sindicato ha solicitado la revisión del caso y la suspensión del comunicado emitido por la universidad hasta que se agoten los procedimientos legales correspondientes.
La UPT, a través de su Comité de Ética y Conflictos de Interés, determinó la separación definitiva del profesor Ángel Ramírez Montiel por faltas graves que vulneran los valores institucionales. Además, se ha dado vista al Órgano Interno de Control para los efectos legales y administrativos conducentes.
Este caso ha puesto de relieve la importancia de contar con protocolos claros y efectivos para la atención de denuncias de acoso y violencia en el ámbito educativo, así como la necesidad de garantizar el derecho a una defensa adecuada para todas las partes involucradas.
La Procuraduría General de Justicia de Hidalgo en Tulancingo continúa con la investigación del caso, mientras ambas partes esperan una resolución que esclarezca los hechos y determine las responsabilidades correspondientes.