El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este viernes en conferencia de prensa en la Casa Blanca una nueva ofensiva contra el narcotráfico en América Latina, ordenando al Pentágono preparar opciones de intervención militar contra los principales cárteles de la región.
“Durante cuatro años no lo hicimos… ahora vamos a proteger a Estados Unidos con mano dura”, declaró el mandatario, al justificar la medida como parte de su estrategia para frenar el flujo de fentanilo y otras drogas hacia territorio estadounidense.
Trump detalló que organizaciones como el Cártel de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación y el Cártel de los Soles de Venezuela han sido catalogadas por su gobierno como organizaciones terroristas extranjeras, lo que, según dijo, otorga un marco legal para acciones más contundentes, incluidas operaciones con fuerzas especiales y el uso de inteligencia militar.
El presidente señaló que la nueva directriz busca “desmantelar por completo las redes criminales” y que se coordinará con gobiernos aliados, aunque no descartó operaciones unilaterales.
En reacción a los anuncios, la presidenta Claudia Sheinbaum rechazó cualquier posibilidad de intervención militar estadounidense en territorio nacional y reiteró que la cooperación bilateral debe darse en el marco del respeto a la soberanía de México.
“Nuestro país no acepta tropas extranjeras”, subrayó, al tiempo que insistió en que el combate al narcotráfico debe basarse en inteligencia compartida y cooperación regional.
Esta es la acción más agresiva contra el crimen organizado internacional desde el inicio de la segunda administración de Trump, y marca un punto de tensión diplomática con varios países de la región, especialmente México y Venezuela.