El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, hizo un llamado a la comunidad internacional para reducir la dependencia del dólar en el comercio global y denunció una supuesta injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos de su país.
Durante un evento partidista en Brasilia, Lula sostuvo que “es hora de que el mundo deje de utilizar el dólar”, al tiempo que propuso la creación de mecanismos multilaterales de intercambio que garanticen soberanía monetaria a las economías emergentes.
“Brasil no puede seguir subordinado a una moneda que funciona como instrumento de chantaje. No se trata de desafiar a Estados Unidos, sino de recuperar nuestra autonomía”, afirmó el mandatario.
En su discurso, Lula también aseguró que Estados Unidos intentó desestabilizar la democracia brasileña mediante presiones diplomáticas, económicas y judiciales. Mencionó como ejemplo las sanciones impuestas contra el juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes bajo la Ley Magnitsky, así como el reciente aumento arancelario del 50 % aplicado por la administración de Donald Trump a productos brasileños.
“Estamos abiertos al diálogo, incluso con el presidente Trump, pero Brasil no es una republiqueta. Queremos negociar en igualdad de condiciones”, declaró.
Las declaraciones del presidente brasileño se dan en medio de crecientes tensiones comerciales y diplomáticas entre Brasil y Estados Unidos, tras la decisión del gobierno estadounidense de elevar sus aranceles e intentar frenar el avance de los BRICS hacia la desdolarización. En respuesta, Lula ha fortalecido su postura dentro del bloque, junto con países como China, India, Sudáfrica y Rusia.
Por su parte, el presidente Donald Trump respondió a las declaraciones asegurando que está dispuesto a dialogar con Lula, pero sin renunciar a la defensa de los intereses económicos estadounidenses.