El excanciller colombiano Álvaro Leyva buscó respaldo entre políticos republicanos de EE.UU. para remover al presidente Gustavo Petro, acusándolo de supuesta adicción a las drogas y promoviendo la llegada de la vicepresidenta Francia Márquez al poder, según revela el diario español El País.
Leyva se reunió hace dos meses con el congresista Mario Díaz‑Balart y trató de establecer contacto con el secretario de Estado Marco Rubio, en un intento de generar “presión internacional” contra Petro. Una fuente citada por el diario afirma que Leyva aseguró tener “herramientas” para sacar a Petro y que la ayuda estadounidense era clave.
El diario tuvo acceso a grabaciones en las que Leyva propone un “gran acuerdo nacional” —incluyendo al ELN y al Clan del Golfo— ante la crisis de violencia y las próximas elecciones de 2026. También menciona al senador Miguel Uribe Turbay como posible aliado.
“Hay que sacar ese tipo (Petro)… este país va al despeñadero”, se le escucha decir a Leyva, quien indica que actores como el ELN y el Clan del Golfo deben ser parte del acuerdo.
Ante estas revelaciones, Petro acusó públicamente al congresista Díaz‑Balart de encabezar un plan para expulsarlo del poder, calificándolo como parte de un “golpe blando” financiado desde EE.UU. También advirtió que, si eso llegara a ocurrir, “debe estallar la revolución colombiana”.
En otra grabación, Leyva reconoce que su reunión fue solo “con un tipo de primera fila: Mario Díaz-Balart”, sin detallar resultados. El diario asegura que la Casa Blanca no contempló respaldar este plan.
Leyva, de 82 años, fue suspendido el año pasado por la Procuraduría tras irregularidades en un contrato de pasaportes. Desde entonces ha difundido cartas acusando a Petro de adicción, como parte de su estrategia para removerlo del poder.
Por último, El País destaca que Leyva atribuye la actual disminución de influencia de Francia Márquez a su supuesta implicación en esta trama conspirativa, tras un consejo ministerial en febrero que generó tensiones internas.