Los paralelismos suelen ser inquietantes.
En su más reciente columna, el escritor Jorge Volpi habla de algunos hechos perturbadores que sucedieron cien años atrás y que guardan un parecido extraordinario con lo que estamos viviendo.
Le dejo al hipócrita lector un fragmento:
“El partido fascista toma el control de Italia, marcando el inicio de la dictadura de Mussolini, y en la Unión Soviética la facción de Stalin se hace con el poder. En Alemania, por su parte, Hitler publica ‘Mi lucha’. Mientras tanto, el mundo se cimbra en un sinfín de pequeños conflictos, azuzados por la rivalidad entre estas dos vertientes antagónicas del totalitarismo: el comunismo y el fascismo. Los ecos de 1925 resuenan, ominosos, un siglo después: adonde quiera que uno mire el desorden global resulta evidente. Nuevos autoritarismos, basados en viejas querellas y resentimientos, renacen por doquier, dejando atrás una época en la cual parecía que la democracia iba a convertirse en la norma en el planeta”.
El caos tiene cara de Trump. El proceso de revocación de mandato en este sexenio —dice la Constitución— deberá convocarse tres meses después del tercer año de gobierno.
En el caso de de la presidenta Claudia Sheinbaum, el tercer año concluye en septiembre de 2027, por lo que la solicitud de revocación de mandato podría realizarse entre octubre y diciembre de 2027, y la consulta se llevaría a cabo el domingo siguiente a los 90 días posteriores a la emisión de la convocatoria.
Es decir: aproximadamente en marzo o en abril de 2028.
La cosa se complica —la cosa siempre tiende a complicarse, no es novedad— porque en junio de 2027 habrá elecciones: señoras elecciones.
(Y la gente estará un poco harta de ir a las urnas)
En 2027 se votarán un total de mil 773 cargos a nivel federal y estatal.
Estos cargos incluyen:
500 diputados federales.
17 gobernadores.
(En los estados de Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Campeche, Chihuahua, Colima, Guerrero, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tlaxcala y Zacatecas.
(Una novedad: en Sonora, el gobernador electo en 2027 ejercerá el cargo solamente por tres años para homologar las elecciones locales con las federales).
680 presidentes municipales.
Mil 88 diputados locales.
(Con excepción de Coahuila, las demás entidades renovarán sus congresos locales).
Además, en 2027 se llevarán a cabo elecciones judiciales para elegir la otra mitad de los cargos del Poder Judicial de la Federación que no se renovaron en 2025, así como cargos judiciales locales en 13 entidades: Baja California Sur, Campeche, Chiapas, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Morelos, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Querétaro, Sinaloa y Yucatán.
Ir a elecciones nuevamente sería desgastante.
¿Cuánto tiempo se tardó la gente en votar en la reciente elección judicial?
Con acordeón oficial: quince minutos.
Con acordeón propio: veinte minutos.
Sin acordeón, y razonando el voto: cuarenta minutos.
A esto hay que sumar los votos para gobernador, diputados federales, diputados locales y ayuntamientos.
¿Cuántas boletas recibirá cada elector en las mesas de casilla?
En la elección judicial, hubo quienes recibieron hasta seis boletas.
A esto hay que sumar las boletas con los nombres de los juzgadores locales y las que contengan las opciones de los cargos arriba citados.
¿Cuántas serán?
¿Quince, dieciséis?
Ese día, júrelo el lector, se desquiciará el proceso.
Dígale a ese elector, además, que tendrá que acudir a las urnas, otra vez, nueve o diez meses después.
¡El caos con cara de Trump!
¿No sería mejor que el proceso de revocación de mandato se realice ese mismo día de junio de 2027?
Una boleta más sería lo de menos.
