En un nuevo y tenso episodio del conflicto en Medio Oriente, el líder supremo de Irán, ayatolá Ali Khamenei, lanzó este miércoles una amenaza directa contra Estados Unidos, advirtiendo que cualquier intervención militar en la región podría generar “daños irreparables” para Washington.
Las declaraciones, transmitidas por la televisión estatal iraní, se producen tras una semana de escalada bélica entre Israel e Irán, luego de los bombardeos israelíes sobre instalaciones nucleares iraníes. En respuesta, Irán lanzó más de 150 misiles balísticos y drones hacia territorio israelí, lo que provocó una fuerte reacción en el entorno internacional.
Khamenei aseguró que Irán no se rendirá ante las presiones ni ante la amenaza de guerra, y criticó duramente al presidente estadounidense, Donald Trump, por sus recientes mensajes en redes sociales, donde afirmó conocer la ubicación del líder religioso y sugirió que Irán podría ser un objetivo militar si continuaba con su ofensiva.
“No nos rendiremos. Ni ante una guerra impuesta ni ante una paz impuesta”, declaró Khamenei.
“Si EE.UU. se involucra directamente en este conflicto, sufrirá consecuencias graves e irreversibles”, añadió.
Reacciones en EE.UU. y Medio Oriente
El gobierno de Trump, que en los últimos días ha reforzado la presencia militar en el Golfo Pérsico, aún no ha emitido una respuesta oficial a las declaraciones de Khamenei. Sin embargo, fuentes del Pentágono confirmaron que las bases militares estadounidenses en Baréin, Catar y Emiratos Árabes Unidos han sido puestas en alerta máxima.
Por su parte, Israel celebró las declaraciones de apoyo de Trump y agradeció el respaldo logístico y de inteligencia proporcionado por Washington en las últimas 48 horas. El primer ministro israelí, Itamar Ben Gvir, calificó a Irán como “una amenaza existencial que debe ser contenida con todos los medios”.
Riesgo de escalada global
Expertos en seguridad internacional y diplomáticos han advertido que el intercambio de amenazas entre Irán y Estados Unidos podría desembocar en un conflicto abierto con repercusiones globales. El secretario general de la ONU, António Guterres, pidió a ambas naciones actuar con mesura y reactivar canales diplomáticos “antes de que sea demasiado tarde”.
Además, Irán ha insinuado la posibilidad de cerrar el Estrecho de Ormuz, una vía estratégica por donde transita aproximadamente el 20% del petróleo mundial, lo que podría desencadenar una nueva crisis energética global.
