Algo está pasando al interior del Club Puebla de la Franja. Algunos movimientos se vienen dando de manera paulatina y, de a poco, se intenta cambiarle el rumbo a la escuadra, con todo y las limitantes que la rodean.
Años de oscurantismo que terminaron por hundir a la escuadra y a la noble afición poblana.
Un equipo que nunca fue rico ni millonario, pero que, con todas las circunstancias que lo rodeaban, veía la manera de salir a flote, con todo y algunos descensos que nos tuvieron al filo de la butaca. Una escuadra que, a jalones y en manos de poblanos, tenía identidad y carisma.
Al volverse insostenible la manutención del equipo por parte de poblanos, llegó una gran empresa como lo es TV Azteca, que tomó a la escuadra más por necesidad que por gusto. Sin embargo, debo reconocer que muchos nos ilusionamos.
Desgraciadamente para los poblanos, llegaron a manejar al equipo un grupo de mercenarios encabezados por un supuesto director de negocios que mangoneaba a todo mundo al interior del club. Quiso engañar a los poblanos vendiéndoles espejitos en redes sociales, haciéndoles creer a los aficionados que se contaba con una gran organización, con gente experta, y jaló a algunos exjugadores del equipo para “taparle el ojo al macho”: un exjugador chileno que, además de ignorante y poco preparado, utilizó su posición para darle trabajo a sus familiares y operar la venta de boletos y playeras robadas de las bodegas del club en el mercado negro. Obviamente, todo operado por la mente “ratera” del famoso Ro(b)a.
Así pasaron muchos, desde directores generales, directores deportivos, miembros del marketing —a quienes fue devastando de a poco junto con su séquito de leales y amantes (hasta tres llegó a tener adentro de las oficinas del Puebla)—. A través de ellas operaba la autodestrucción de quien le estorbaba; a algunas hasta departamento les compró con dinero del club para complacerlas. Y como pago a sus favores de todo tipo, hoy estas “señoritas” están desterradas del Club Puebla. Sin embargo, no las dejó morir: a una la envió al área de marketing de Rayados de Monterrey y a la otra la acomodó en la Ciudad de México, en la femenil del Club América, abusando de sus relaciones.
A la que sí dejó a su suerte fue a la llamada “Gorda”, quien ahora se tiene que rascar con sus uñas.
Actualmente se va a venir una limpia en las oficinas del Puebla, la cual algunos olfatean, pero no saben en qué momento va a suceder.
De 90 empleados bajaron a 70, y se intenta reducir a la mitad para volver más eficiente el trabajo y, obviamente, la economía de la escuadra.
La llegada de Rafael “Chiquis” García a la dirección deportiva marcó una manera diferente de ver el desarrollo de la escuadra.
El criticado Albert Espigares, según me dicen, llegó a destapar una cloaca enquistada de años al interior del equipo.
La salida de los utileros de las fuerzas básicas desmembró una mafia familiar, donde resultó que todos, absolutamente todos, eran o son parientes del histórico “More”, situación que casi nadie sabía desde hace casi ocho años.
Según me platican, se vienen cambios de fondo, los cuales van dirigidos a mejorar el desempeño y la relación con los aficionados.
La salida de la “madam”, a quien apretaron hasta que la hicieron renunciar, va encaminada a que la lastimada relación entre el Puebla y los medios de comunicación serios mejore y camine de buena manera, después de la destrucción de la que fue objeto por parte de Ro(b)a y su amante Esmeralda.
Al pobre Ro(b)a ya le quitaron el área de negocios, pues según me platican, no vende una ching…
Le sacaron a la amante y, por ahora, solo le dejaron el tal marketing, el cual también es un verdadero fracaso ante un equipo perdedor como el que hemos tenido durante los últimos años bajo el liderazgo de este pobre “chiquitín”, a quien en las oficinas ya nadie pela ni obedece. Está apestado y ya todos saben que quien esté con él va para afuera, y que es solo cuestión de tiempo.
Sus antiguos aliados, como el representante legal del equipo de apellido Flowers, el mismo dizque dueño Manuel Jiménez y varios más, ya lo evitan y marcan su distancia.
En los últimos días, un servidor ha recibido distintos mensajes del interior de la organización, donde me aseguran que, por órdenes de arriba, se tiene la instrucción de que las cosas mejoren del interior del club hacia afuera, y que, por principio de cuentas, tendrán toda la apertura hacia todos los medios de comunicación poblanos, con el objetivo de que el equipo, de a poco y a pesar de sus limitantes, pueda volver a meterse en la piel del poblano.
YA HAY REFUERZOS ENTRENANDO 🎽
Rafa García confirmó a @pepehanan que varios refuerzos ya están entrenando a la par de sus compañeros en el @ClubPueblaMX.
Descubre de quién se trata y comenta qué opinas sobre los mismos 👀 pic.twitter.com/iGA84mK14X
— En Línea Deportiva con Pepe Hanan (@enlineadeportiv) June 7, 2025
Al parecer la intención existe y va en serio, aunque desgraciadamente solo será realmente creíble cuando el famoso Ro(b)a abandone la institución, pues ningún medio de comunicación y aficionado lo creerá mientras ese sujeto permanezca dentro del organigrama de la institución camotera.
Aun así, debo reconocer que al menos gente como Gabriel Saucedo y Rafael “Chiquis” García han mostrado madurez y apertura para lograr una comunicación fluida de manera pública con distintos actores mediáticos y aficionados en general, además de incluso ponerse a las órdenes del gobernador Alejandro Armenta, con el afán de que tanto gobierno como equipo puedan trabajar de manera conjunta para darle oportunidad a los poblanos del interior del estado, situación que desde hace ocho años nadie recordaba con respecto al Club Puebla.
Se dice que Jiménez ya viene en el mismo tenor, por lo que nosotros veremos y diremos.
Hasta la próxima.
