La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó este miércoles su firme rechazo a la iniciativa legislativa presentada en la Cámara de Representantes de Estados Unidos que busca aplicar un impuesto del 5% a las remesas enviadas por migrantes a sus países de origen.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum calificó la medida como “injusta y discriminatoria”, recordando que los migrantes ya pagan impuestos en EE.UU., sin importar su estatus migratorio. “¿Cómo van a gravar si ya pagan impuestos?”, cuestionó la mandataria.
Asimismo, dio lectura a una carta firmada por senadores de todas las fuerzas políticas en la que el Senado de México manifestó su oposición unánime a la propuesta. El documento advierte que el impuesto representaría una doble tributación, ya que las remesas provienen de ingresos previamente gravados en territorio estadounidense.
“El 80% del ingreso de los migrantes se queda en Estados Unidos y fortalece su economía; el 20% que mandan a sus familias, también lo quieren gravar. Eso es injusto”, subrayó Sheinbaum.
La propuesta, impulsada por el congresista republicano Jason Smith como parte del paquete legislativo “The One, Big, Beautiful Bill”, ha generado un amplio rechazo en México por sus posibles efectos en millones de familias que dependen de las remesas.
Además del Senado, la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados también se pronunció este miércoles a favor de cancelar la propuesta, destacando que atenta contra los derechos humanos de los migrantes y afectaría la economía tanto de México como de EE.UU.
Sheinbaum concluyó reiterando que su gobierno defenderá a los migrantes y llamó a las autoridades estadounidenses a reconsiderar una propuesta que calificó como contraria a los principios de justicia y equidad tributaria.