El estado de California ha presentado una demanda federal contra el presidente Donald Trump por la imposición de nuevos aranceles a México, Canadá y China, argumentando que estas medidas son inconstitucionales y perjudiciales para la economía estatal.
El gobernador Gavin Newsom y el fiscal general Rob Bonta interpusieron la querella ante el Tribunal de Distrito del Norte de California, señalando que Trump utilizó indebidamente la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA) para imponer aranceles sin la aprobación del Congreso. Las tarifas incluyen un 25% a las importaciones de México y Canadá, y hasta un 145% a productos chinos.
Newsom advirtió que estas políticas podrían costarle a California miles de empleos y afectar sectores clave como la agricultura y la tecnología. Bonta, por su parte, afirmó que los aranceles violan la Constitución al exceder la autoridad presidencial y eludir al Congreso.
La Casa Blanca defendió las medidas, argumentando que son necesarias para abordar desequilibrios comerciales y proteger la seguridad económica nacional. Sin embargo, expertos legales y económicos han cuestionado la legalidad y eficacia de los aranceles, señalando que podrían desencadenar represalias y afectar negativamente al comercio internacional.
Esta demanda se suma a otras acciones legales emprendidas por California contra políticas de la administración Trump, reflejando las crecientes tensiones entre el estado y el gobierno federal en materia de comercio y economía.
