Que Ignacio Mier supera a Alejandro Armenta en cuatro puntos porcentuales en conocimiento —según la encuesta del CEN de Morena— significa que los resultados de los estudios demoscópicos que promovían al senador fueron mentiras. Se infiere que las encuestadoras nacionales fracasaron y que los sondeos contratados no definen candidaturas.
Una segunda conclusión es que caballo que alcanza, gana.
Habían creado la percepción que uno de los competidores era inalcanzable e imparable, ayer, ese discurso ya no cupo ni por el escusado. Los adversarios de Mier ya no pudieron sobarse con sus ambas manos.
Las encuestadoras que sí dieron resultados más certeros fueron (no importa el orden) Mas Data, El Ave, BEAP y Centro de Estudios Consultivos. Y Enkoll, por quinta ocasión, resultó un fraude.
Tercera conclusión: hay que saber leer las señales.
Qué pinches son los políticos y los periodistas que no entienden qué es una señal. Piensan que la señal es una llamada de teléfono que dice “prepárate, vas a ser tú”.
No, no, no, ese es un mensaje, no una señal.
En el momento de la sucesión gubernamental son los símbolos, signos, síntomas, y pequeños hechos que se convierten en piezas de un gran rompecabezas que al unirlos terminan por ser Palabras Mayores.
La señal, según el diccionario, es un indicio que permite deducir algo de lo que no se tiene un conocimiento directo.
Intentemos armar el rompecabezas:
El pasado sábado 30 de septiembre, se celebró el Consejo Estatal de Morena, se había previsto que Ignacio Mier quedara fuera de la contienda y que sólo entrara Julio Huerta, Alejandro Armenta o Rodrigo Abdala, Liz Sánchez y Olivia Salomón.
Algo ocurrió, pues se cambió la jugada: entraron Huerta, Liz y Salomón, se coló Ignacio Mier y quedaron fuera Armenta y Abdala.
Primera señal, la percepción cambió porque el diputado federal sería evaluado sí o sí. Sus números y sus bonos crecieron.
Segunda señal, Adán Augusto López se convertirá en el coordinador de las nueve entidades donde habrá elecciones; Leonel Godoy, será el delegado de la cuarta circunscripción y, para el caso concreto de Puebla, se espera la llegada del diputado federal Juan Ramiro Robledo.
Tercera señal: Nacho Mier supera por cuatro puntos a Alejandro Armenta en conocimiento, según los datos oficiales de Morena. Podríamos incluir que, además, el legislador Mier pues es el más cercano a López Obrador y que muchos diputados le dieron cobijo y lo arroparon el domingo en Tecamachalco, durante su informe de labores.
Faltan poco más de 15 días para las palabras finales, pero el rompecabezas se va armando y con lo ocurrido ayer tumbaron varios mitos.
La decisión final será desde Palacio Nacional.
