Tras la vinculación a proceso de los hermanos Luis Alberto N. y Francisco Rodolfo N. por la golpiza multitudinaria cometida contra el joven Ernesto Calderón, el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, aprovechó el micrófono en el aniversario de la Consumación de la Independencia de México para hacer un llamado a la reflexión.
El morenista expresó que más allá de celebrarse el avance en el caso, llamó a las familias a reconsiderar la educación que les brindan a sus hijos, toda vez que dijo, este incidente fue lamentable y nunca debió haber ocurrido.
Céspedes Peregrina externó que el Poder Judicial tendrá la última palabra en cuanto a la resolución del caso que involucra a los dos estudiantes de la universidad Anáhuac involucrados en la agresión, mientras que por parte del Ejecutivo existe un llamado a la reflexión sobre las conductas de los jóvenes en la sociedad.
“Hechos lamentables como los que pasaron con los jóvenes que hoy siguen un proceso legal, es algo que a mí, en lo personal, me duele y me lastima, primero porque nunca debió haber sucedido, porque el peso de la ley es un paso que desgraciadamente tiene que tener consecuencias hacia cualquier involucrado, pero no es un tema que corresponda a mí. Lo que a mí me corresponde es decir que es fundamental el llamado a la reflexión en cada uno de los hogares poblanos, a saber perfectamente cómo luchamos todos para volver a ser comunidad”, expresó.
El mensaje de Salomón ocurre un día después de que los gemelos Luis y Francisco R. fueron vinculados a proceso por los delitos de lesiones calificadas y discriminación.
La jueza de control a cargo del caso, en una audiencia que mantuvo en vilo a la opinión pública, dictó la medida cautelar de prisión preventiva justificada para ambos hermanos, quienes fueron trasladados de inmediato al penal de San Miguel.
Además, se estableció un plazo de dos meses para la realización de la investigación complementaria, según confirmó María del Coral Zavaleta, abogada del caso, al salir de la audiencia que se prolongó durante siete horas en Casa de Justicia de la 11 Sur.
El giro en este caso se produjo cuando los hermanos, conocidos por su expulsión de la Universidad Anáhuac tras los hechos, se entregaron voluntariamente este lunes ante las autoridades ministeriales.
El video que circuló ampliamente en redes sociales mostró a los gemelos como los principales agresores, en particular uno de ellos, presuntamente Luis N., quien propinó una patada en la cabeza a Neto Calderón.
La víctima del ataque sigue luchando por su recuperación. A la fecha, los médicos no han podido determinar con exactitud el alcance de sus lesiones, ya que esperan que se desinflame antes de realizar un diagnóstico más preciso.
El joven aún corre riesgo de perder uno de sus ojos debido a la brutal golpiza que sufrió a manos de siete individuos, algunos de los cuales también enfrentan consecuencias académicas de expulsión en el Tecnológico de Monterrey, campus Puebla.
A pesar de la difusión del video, otros cinco implicados en el ataque aún se mantienen prófugos, por lo que la Fiscalía General del Estado ha llevado a cabo diversos actos de investigación, así como han emitido una alerta migratoria para identificar la posible huida de los agresores fuera del país.
La defensa de Neto Calderón no excluyó la posibilidad de un acuerdo entre ambas partes en el futuro, lo que dependerá de la evidencia recopilada durante las investigaciones.
