En entrevista, evoca las luchas estudiantiles y asegura que el México autoritario se acabó con la 4T; ve unidad “sobre todo abajo” en Morena en el estado
En 10 meses, Claudia Sheinbaum Pardo ha visitado siete veces el estado de Puebla, para asistir a actos oficiales como jefa de Gobierno de Ciudad de México –cargo que dejó el 16 de junio–, lo mismo que para reunirse con simpatizantes de su proyecto político.
Durante ese tiempo, la aspirante a coordinadora nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación (4T) ha confirmado, dijo, que existe unidad en su partido, de cara a las elecciones para la gubernatura de Puebla en 2024.
Tras recordar que los adversarios están afuera del movimiento, lanza una advertencia a quienes ahora buscan la nominación para ese cargo: deben tener mucha madurez política.
Entre su participación en un foro nacional de transportistas en la capital poblana y su llegada a Huejotzingo, para una asamblea con 25 mil mujeres, Claudia Sheinbaum Pardo se toma unos minutos durante su última gira a la Angelópolis y, en entrevista con Hipócrita Lector y Exilio.mx, resalta las características que debe tener el próximo o la próxima candidata a la gubernatura.
También destaca el trabajo del gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina y su apoyo a la educación: “está haciendo un gran papel en Puebla”.
En un momento, la exjefa de Gobierno de Ciudad de México se remonta al movimiento estudiantil de 1968, el que vivió al lado de su madre, y recuerda que el México del autoritarismo ya se fue, junto con el neoliberalismo.
Precisamente, al referirse al “pasado oscuro”, mete en ese saco al Frente Amplio por México –integrado por el PRI, PAN y el PRD–, al que acusa de querer regresar a un país en el que los derechos sean convertidos en mercancía, mientras se ponen en circulación los privilegios para unos cuantos.
“Cuando llega la derecha, se acaban los derechos”, advierte la morenista, quien camina para ser la próxima primera mujer en la presidencia de México.
Madurez política
Puebla también tendrá, en menos de un año, elecciones para renovar alcaldías, el Congreso del Estado, diputaciones federales, senadurías y la gubernatura.
-¿Qué deben hacer los poblanos para mantener la unidad y la gubernatura?
-Yo veo aquí mucha unidad en el Movimiento (Regeneración Nacional), la verdad, mucha unidad, sobre todo abajo, hay mucha unidad, y en algunos líderes que, naturalmente, están buscando cada uno su momento para 2024.
Sin embargo, destaca que debe haber “mucha madurez política” en quienes buscan ser el candidato o la candidata a la gubernatura, al tiempo de delinear los atributos de quien debe ocupar la posición: “honestidad, liderazgo, amor a su pueblo, conocimiento de su pueblo y mucha convicción”.
Sheinbaum también les recuerda que en el partido no hay adversarios, solamente compañeros y amigos. “Los adversarios políticos están en otro lado, no están adentro”.
En buenas manos
El 25 de mayo de este año, el gobernador poblano, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, anunció la construcción de Ciudad Universitaria 2 de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), un complejo que ofrecerá estudios a miles de personas más.
Sheinbaum Pardo, quien es física, doctora en Ingeniería, en Energía e investigadora de la UNAM, destaca la propuesta del mandatario estatal, al igual que el buen trabajo de su administración.
“Creo que el gobernador está haciendo un gran papel en Puebla, en este momento, Puebla está en buenas manos. Hay muchos proyectos.
“A mí me dio mucho gusto, hablando de educación, que se vaya a hacer un nuevo campus para la BUAP en Puebla, y creo que la transición va a ser muy buena para el movimiento”.
La relación entre Sheinbaum Pardo y Céspedes Peregrina es cercana, luego de que el segundo asumió la gubernatura por el fallecimiento de Miguel Barbosa Huerta, el 13 de diciembre pasado.
Fin del autoritarismo
A los seis años, Claudia Sheinbaum Pardo tuvo su primer roce con el autoritarismo. El movimiento de 68, del que fue parte su madre como integrante del Instituto Politécnico Nacional (IPN), así como la represión del gobierno contra sus participantes, lo recuerda muy bien.
Hoy, a 55 años de distancia, asegura que este rasgo de la autoridad federal se terminó con la llegada del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Se acabó el autoritarismo, que se acabó el neoliberalismo, que se le puso fin a principios de diciembre de 2018, y que estamos a las puertas de una nueva era (…) de ese tamaño es la transformación”.
El tema viene a cuenta, cuando se le recuerda la evocación, que en algunas de sus asambleas en el país, ha hecho sobre su participación como líder en el Consejo Estudiantil Universitario (CEU) de mediados y finales de los años 80. Hoy, una líder estudiantil está en la antesala de la Presidencia de la República, lo que hace unas décadas hubiera sido impensable.
Para Sheinbaum Pardo, los estudiantes que luchaban por sus derechos, al igual que los presos políticos, desde 1968, hoy reciben la justicia que se les negó durante varias décadas.
“Lo que hay, es una economía moral. Lo que hay, es el humanismo mexicano que tiene necesariamente la segunda fase de la Cuarta Transformación”.
Tienda de disfraces
La oposición parece una “tienda de disfraces”, advierte Claudia Sheinbaum al referirse a los integrantes del Frente Amplio por México, que en las últimas semanas han intentado apropiarse de las propuestas de la izquierda.
“El PAN hizo un spot en la televisión. Me río porque el spot dice: Fox, en cuerpo. Dice que él inventó la pensión adulta mayor (…) Y hace dos días, Fox dice que todos esos son los flojos, no voy a usar su palabra, y que no debería haber programas sociales y que, en todo caso, que se pongan a trabajar y que regrese la pensión para los expresidentes.
“Un día dicen una cosa y otro día dicen una cosa, pero no es característica de Fox y la condición en la que hoy está, es característica de la derecha. Hay mucha hipocresía, mucho cinismo”.
De acuerdo con la ex mandataria de la capital del país, la derecha se viste de ciudadana, aunque realmente representan al pasado, ese en el que los derechos se convierten en mercancía.
“Cuando llega la derecha, se acaban los derechos. Eso es lo que ellos representan, la terminación de los derechos y el inicio nuevamente de los privilegios”.
Advierte que ese proyecto político ya se marchó, junto con el pasado neoliberal y la corrupción.
“Lo que nosotros representamos, pues es lo que quiere el pueblo de México, que es que continúe un gobierno cercano al pueblo de México y que represente al pueblo de México”.