A pesar de que pobladores indígenas de las juntas auxiliares de San Miguel Canoa y La Resurrección advirtieron la aplicación de toque de queda y la implementación de medidas estrictas para protegerse de la inseguridad, el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez aseguró que en ambas demarcación están coordinarnos con los ediles subalternos para proporcionar vigilancia.

Rivera Pérez aseveró que en estos sitios han realizado operativos de Normatividad a comercios, retenciones de delincuentes y patrullajes constantes, aún cuando los pobladores denunciaron este lunes que no hay presencia de policías e inclusive algunos están coludidos con algunas mafias.

“Hay una coordinación directa de Gobernación con los presidentes auxiliares, específicamente de Canoa y La Resurrección, las personas que hicieron el pronunciamiento ayer en la rueda de prensa, estamos en disposición de ponernos a sus órdenes para dialogar pero estamos trabajando de manera coordinada con los presidentes auxiliares”, indicó.

La declaración del munícipe es contraria a la versión del consejo indígena de la junta auxiliar de La Resurrección, quienes expresaron que en ambas demarcaciones son constantes los casos de secuestros, tala clandestina, robos de vehículos y a casa-habitación.

Es por ello que advirtieron, existe la posibilidad de que coloquen plumas de acceso y soliciten a los residentes identificaciones para poder ingresar a las juntas auxiliares, así como implementar un toque de queda a partir de las 12 de la noche.