En Puebla se espera un repunte de entre 15 y 20 por ciento de casos de cáncer, debido a que durante dos años y medio fueron suspendidas las pruebas de detección temprana, alertó el secretario de Salud, José Antonio Martínez García, quien advirtió que esta situación tendrá una importante repercusión en el presupuesto para atender esta enfermedad en el estado.
En entrevista, Martínez García explicó que, durante la pandemia, ocasionada la propagación de la Covid-19 en todo el país, se generó un rezago en la detección de diferentes tipos de cáncer en el estado.
Indicó que la dependencia a su cargo dejó de hacer pruebas de detección temprana como mastografías, de manera masiva entre la población objetivo, sin embargo, ello obedeció a una normatividad federal a la que se sujetó la Secretaría de Salud durante los ejercicios 2020, 2021 y el primer semestre de 2022.
“Tuvimos un rezago por la pandemia, eso nadie lo puede evitar, dejamos de hacer mastografías en masa porque no lo podíamos hacer por normativa durante 2020, 2021, y mitad de 2022 lo dejamos de hacer”, reveló.
Antes de la pandemia, en el primer semestre de 2019, se realizaron 6 mil 783 mastografías, con lo que se pudieron detectar 387 posibles casos positivos de cáncer. A principios de 2020, año en que fueron suspendidas, hubo 586 pruebas, detectando 100 posibles casos.
El titular de los Servicios de Salud en el estado previó que se deberá agilizar la aplicación de pruebas para compensar el periodo en el que fueron suspendidas, ya que alertó que se incrementarán los casos de esta enfermedad.
“Hay que meternos con todo porque muy probablemente, no, no muy probablemente, es un hecho que se van a incrementar los cánceres de mama, los cánceres cervicouterinos, los de próstata, en un porcentaje considerable”, comentó José Antonio Martínez.
A pregunta expresa, el doctor indicó que se estima que entre 15 o 20 por ciento será el incremento que pudiera registrarse en el estado porque “dejamos de hacer el diagnóstico oportuno”, lamentó.
Martínez García dijo que para este año se reactivaron las ferias de la salud, así como las jornadas de atención “Martes Ciudadanos” y “Viernes de las Mujeres”, a través de las cuales se han podido volver a aplicar las pruebas diagnósticas, el objetivo es acelerar las pruebas.
“Lo que necesitamos es llegar y hacer otra vez todas las detecciones de forma inmediata a toda la población, entonces estamos haciéndolo con ferias de salud, en todas las subdirecciones, más los Martes Ciudadanos y los Viernes de las Mujeres”, apuntó.
A este esquema de atención a la ciudadanía se suman las diez jurisdicciones sanitarias en las que se dividen los Servicios de Salud del Estado, las cuales llevan los servicios a las localidades donde están ubicadas.
José Antonio Martínez reconoció que el repunte en los casos de los diferentes tipos de cáncer tendrá una repercusión en el presupuesto estatal destinado para atender esta enfermedad, pues sus tratamientos implican una millonaria inversión por paciente.
“Es una enfermedad muy cara y si lo detectamos temprano es baratísimo, si yo te detecto con el Papanicolau, te mando a colposcopia y ahí se puede solucionar el cáncer con una cirugía menor, pero si no lo detecto tempranamente, ya llegan (a los hospitales) en etapa tardía con infiltración pulmonar, y hay que darle quimioterapia, radioterapia y cirugía y se van millones y millones de pesos en un solo paciente”, abundó.
Esta semana, la Secretaría de Salud llevará el “Viernes de las Mujeres” al municipio de Izúcar de Matamoros, en donde se brindarán servicios de promoción a la salud, pruebas de VIH-Sífilis y Hepatitis C, planificación familiar, citologías, consulta general y dental, vacunas, detección de enfermedades crónicas, estimulación temprana, vacunación antirrábica de perros y gatos, mastografías y vectores.