El presidente Nicolás Maduro sostuvo una conversación telefónica con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para expresar su preocupación ante lo que calificó como una “escalada de amenazas” por parte de Estados Unidos tras el anuncio de un bloqueo total a buques sancionados que transporten petróleo venezolano.

Durante la llamada, Maduro denunció declaraciones del presidente estadounidense, Donald Trump, en las que afirmó que el petróleo, las riquezas naturales y el territorio venezolano le pertenecían, calificando estas afirmaciones como “inaceptables”. Según un comunicado oficial de la Cancillería venezolana, el mandatario instó a que estas declaraciones sean rechazadas de manera categórica por el sistema de Naciones Unidas, ya que representan una amenaza directa a la soberanía, al derecho internacional y a la paz regional.

El diálogo refleja la tensión entre Caracas y Washington, en un contexto en el que las sanciones y bloqueos energéticos han aumentado la presión sobre el gobierno venezolano. Maduro enfatizó la necesidad de que la comunidad internacional intervenga para preservar la estabilidad y el respeto al derecho internacional, en un momento crítico para la región latinoamericana.