El gobernador Alejandro Armenta, en compañía del director del Centro INAH-Puebla, Manuel Villarruel Vázquez, encabezó un recorrido en la zona arqueológica de Los Teteles, ubicada en el municipio de Acatzingo, considerada uno de los hallazgos más importantes en la historia reciente del estado.
Este sitio forma parte de un conjunto de ciudades señorío que incluía Tepeaca, Cuautinchán y Acatzingo, y ahora, gracias al esfuerzo conjunto entre el Gobierno del Estado y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), se encamina a ser un referente arqueológico y turístico a nivel nacional e internacional.
Alejandro Armenta apuesta por el patrimonio cultural
Durante la visita, el mandatario estatal resaltó que su administración tiene un firme compromiso con el rescate de sitios históricos y arqueológicos:
“Ahora que un acatzinca de corazón es gobernador, mal haríamos en no rescatar este sitio y ponerlo en los ojos del mundo”, expresó Armenta.
Además, anunció que se trabajará para rescatar otras zonas arqueológicas en Teteles de Ávila Castillo, Tlacotepec de Benito Juárez, San Nicolás Buenos Aires y Cantona, como parte de una estrategia integral para proteger el acervo histórico del estado.
Los Teteles, sitio clave para la arqueología poblana
Por su parte, Manuel Villarruel, director del Centro INAH-Puebla, explicó que el sitio de Los Teteles está compuesto por montículos de gran tamaño, algunos sobre plataformas con basamentos piramidales, lo que indica un alto valor arquitectónico y ceremonial.
Villarruel destacó que se comenzará con el registro del sitio en el Sistema Nacional de Zonas Arqueológicas, así como con una serie de proyectos enfocados en la recuperación y consolidación de los terrenos.
Un paso hacia el turismo cultural y el desarrollo regional
La iniciativa forma parte de una visión de gobierno que busca impulsar el turismo cultural y fomentar el desarrollo económico regional a través de la preservación del patrimonio.
Este proyecto no solo representa un rescate histórico, sino también una oportunidad para que Acatzingo se posicione en el mapa mundial como un punto de interés arqueológico, histórico y comercial.