Quien hoy es homenajeada en el Salón de Plenos del Congreso del Estado no es una diputada más, de hecho, es alguien que antes de reconocerse por su encargo de diputada local se definió como ciudadana por encima de todas las etiquetas.
Los cánticos en sollozos de mujeres, integrantes de colectivas feministas, de madres que sufren de violencia, dejan de manifiesto el impacto que tuvo su trabajo en casi dos años de legisladora: “¡Aurora, escucha, esta es tu lucha!”, exclaman mientras un féretro ingresa por las puertas del Congreso de Puebla.
Los tres poderes del Estado e integrantes de la sociedad civil rindieron un homenaje póstumo en honor a la diputada Aurora Sierra Rodríguez, fallecida el 9 de agosto a causa de un paro cardiaco.
El gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina; la presidenta del Tribunal Superior de Justicia, Margarita Gayosso Ponce; el presidente del Congreso local, Eduardo Castillo López, así como integrantes de la LXI Legislatura y familiares rindieron un homenaje para la legisladora del distrito de Cholula.
Al pie de la tribuna legislativa, donde en varias ocasiones se paró para fijar posicionamientos, presentar iniciativas de reforma y puntos de acuerdo, el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, Eduardo Castillo López, destacó el trabajo de Aurora Sierra como una luchadora por los derechos de las mujeres, al mantener su compromiso y trabajo con la igualdad de género y la protección de los derechos humanos.
A un lado de la familia que escuchaba las palabras del legislador morenista, Castillo López enfatizó que el legado de la diputada permanecerá en las leyes y reformas que promovió en beneficio de las mujeres y diversos sectores sociales para su beneficio, donde resaltó el trabajo que mantuvo a lo largo de la legislatura para impulsar la Ley Vicaria y Ley Ácida, que actualmente han beneficiado a las mujeres de Puebla.
“Siempre fue una extraordinaria amiga, una extraordinaria aliada, y una extraordinaria legisladora, su partida nos deja un gran vacío, pero su legado permanecerá vivo en nuestra memoria. Las leyes y reformas que promovió en beneficio de las mujeres y de todos los sectores sociales sentaron un precedente para tener un estado más justo y equitativo. Gracias por tu labor legislativa que impactará positivamente en la vida de muchas personas, como ya ocurre en la Ley Vicaria y la Ley Ácida, por mencionar algunas”, mencionó.
Desde las galerías del Salón del Pleno, una de sus amigas y aliadas en una de las reformas de mayor importancia en esta legislatura, María Elena Ríos —saxofonista y activista de Oaxaca que promovió la aprobación de la Ley Ácida para castigar estos ataques como tentativa de feminicidio— escuchaba las palabras del presidente del Congreso local, aguantando las lágrimas.
El presidente de la Junta de Gobierno del Congreso de Puebla recordó que independiente de su labor como legisladora, queda su relación de amistad de más de 15 años, compartiendo vivencias de trabajo y política, recordada como extraordinaria amiga y extraordinaria aliada.
Consciente del nivel de iniciativas que presentó, la productividad que tuvo y la importancia de cada propuesta, el legislador morenista aseguró que los diputados locales seguirán con su ejemplo para mantener la lucha por la igualdad de género y la protección de los derechos humanos.
“En este Poder Legislativo asumimos el compromiso de continuar con su lucha al trabajar por la igualdad de género y la defensa de los derechos humanos, así honraremos su labor y seguiremos su ejemplo con compromisos, dedicación y entrega. Descansa en paz querida amiga, que Dios te tome en su santa gloria”, externó.
Tras él, las guardias de honor transcurrieron una tras otra, de la Junta de Gobierno y de cada una de las bancadas, cada una distinta ideológicamente, pero con las que colaboró sin distinción partidista en todo momento.
Pese a su muerte, el grito de justicia de las mujeres, madres víctimas de violencia vicaria en su mayoría, la mantendrá viva, pues ella les dio voz cuando nadie se las daba.
“¡Aurora, escucha, esta es tu lucha!”, dice una y otra vez las mujeres que seguirán en lucha con la voz que Aurora les dio.
