La justicia francesa confirmó este miércoles la condena contra el expresidente Nicolas Sarkozy por la financiación ilegal de su campaña presidencial de 2012. La Cour de Cassation, el máximo tribunal de apelación, ratificó la sentencia de un año de prisión, de la cual seis meses deberán cumplirse de manera efectiva.
El fallo considera probado que la campaña de Sarkozy rebasó ampliamente el límite legal de gasto, utilizando un sistema de facturas falsas y servicios inflados para ocultar costos reales. Aunque el exmandatario no participó directamente en la manipulación contable, los jueces determinaron que, como candidato y beneficiario del esquema, tenía responsabilidad legal en el rebase millonario.
La decisión supone un nuevo revés para el expresidente, quien enfrenta además otros procesos judiciales. Pese a que la condena contempla prisión efectiva, el tribunal dejó abierta la posibilidad de que Sarkozy cumpla la pena en arresto domiciliario con brazalete electrónico, según lo determine el juez de ejecución de sentencia.
Con esta resolución, el caso por la campaña de 2012 queda cerrado en la justicia francesa. El exmandatario, por su parte, anunció que evalúa recurrir la decisión ante instancias europeas.

