|Cirilo Calderón
Enviado especial Tlaxcala
La directora del Conacyt, Elena Álvarez Buylla Roces, reveló que entre 2015 y 2019 fallecieron 11 mil 243 personas a causa de enfermedades relacionadas con la contaminación, mientras que en el 71 por ciento de los 3.5 millones de habitantes de la cuenca existe un mayor riesgo por daño, índice mayor que en los habitantes de la Ciudad de México.
La Cuenca del Alto Atoyac, explicó durante el Foro Regional sobre la problemática de la cuenca del Alto Atoyac, celebrado en la Universidad Autónoma de Tlaxcala, forma parte de los cinco ríos con declaratoria de clasificación de la Conagua que requieren saneamiento urgente por su alta toxicidad, por lo que hizo un llamado a los gobiernos de Puebla y Tlaxcala emanados de la 4T a establecer políticas como el reordenamiento poblacional para atender esta problemática.
“Este primer foro regional es una oportunidad histórica porque avanzamos juntos, gobiernos, instituciones y comunidades en un contexto político que se mantiene firme en la convicción de estar del lado del pueblo. Además, con gobiernos ahora en los estados de Tlaxcala y de Puebla, que se mantienen con claridad en esta misma tesitura”, puntualizó la titular de Conacyt a nivel federal.
26 MIL EMPRESAS OPERAN EN LA CUENCA
Andrés Barreda Marín, coordinador del Programa Nacional Estratégico Agentes Tóxicos y Procesos Contaminantes del Conacyt, fue el encargado de dar los datos duros sobre la problemática existente en la cuenca del Alto Atoyac.
Mas de 26 mil empresas operan en la cuenca. Y en el área específica del valle de Puebla operan 16 mil 220, mientras que en Tlaxcala son 10 mil 100 empresas. Del total mil 390 son consideradas por la Semarnat como potencialmente contaminantes porque son las que manejan sustancias consideradas como peligrosas, corrosivas, explosivas, tóxicas, inflamables o biológico-infecciosas.
De las mil 390, únicamente 290 declaran al Registro de Emisiones y Transferencia de Contaminantes en 2020. En esta región de emergencia sanitaria, agentes tóxicos con mayor riesgo liberados proceden de una veintena de sectores y 70 subsectores de actividad económica, de los cuales 11 y 50, respectivamente, están obligados a informar “voluntariamente” el tipo de contaminación que liberan al ambiente.
En la cuenca del Alto Atoyac, la Semarnat identificó a 288 empresas que manejan sustancias altamente peligrosas de los sectores metálico, plástico, hule, cal y cemento, automotriz y textil, que operan en un conjunto de 25 parques, ciudades y corredores industriales.
En contraparte, hay empresas que no están obligadas a reportar y, sin ser dadas de alta como empresas, realizan procesos contaminantes en la producción de textiles y partes automotrices bajo un esquema de talleres domiciliarios. Los procesos subcontratados más importantes son: el acabado de productos textiles, como deshilado y deslavado de mezclilla, la producción de componentes y autopartes automotrices.
Del amplio número de empresas que operan en la cuenca, entre el 1 y 2 por ciento declaran sus emisiones y transferencias de contaminantes, quedando fuera un amplio número de sectores y subsectores, “que deberían ser supervisados por las secretarías estatales de Medio Ambiente”, dijo Barreda Marín.
Otro dato alarmante que dio el investigador es que de las más de 11 mil sustancias que se importan en el país, el Registro de Emisiones y Transferencia de Contaminantes únicamente pide información de 200 de ellas.
Los suelos es el lugar en donde se concentra el 95 por ciento de los agentes tóxicos, y los suelos de la región están “extraordinariamente contaminados”, añadió. El huachicol y el huachigas también son factores que han contaminado el suelo en la cuenca.
“Es muy importante discutir estos temas de una nueva manera. Ya no jugando el juego de que eso no provoca problemas de salud. Es muy importante tomarnos en serio el tema de la salud ambiental porque aguas, aires y suelos en esta región son de los más contaminados de todo el país y por eso se vive esta situación de crisis tan grave que la pandemia no vino sino a mermar. La pandemia se montó sobre comorbilidades, pero las comorbilidades tienen un fuerte origen ambiental”, sostuvo.
EN PUEBLA HAY UN CAMBIO RADICAL DE ENFOQUE: GUEVARA
El gobierno del estado de Puebla ha atendido 8 de los 11 puntos de la recomendación que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en 2017 para atender la contaminación en el Río Atoyac, y se han iniciado 13 procedimientos administrativos en contra de empresas contaminantes.
Durante el Foro Regional sobre la problemática de la cuenca del Alto Atoyac, la secretaria de Medio Ambiente de Puebla, Beatriz Manrique Guevara, dijo que esta administración instauró una nueva visión de recuperación ecológica para salvar al Atoyac.
Durante su participación, la secretaría de Medio Ambiente dijo que en Puebla existe un cambio radical de enfoque sobre la problemática que enfrenta el Atoyac, a partir de la llegada del gobierno que encabeza Miguel Barbosa Huerta.
“A la luz de los resultados que nos encontramos con la administración en Puebla, lo primero era tomar con seriedad dos faros orientadores para las acciones que son la recomendación de la CNDH y la declaratoria del Atoyac”, comentó.
Refirió que a partir de ello se estableció una hoja de ruta para atender de manera interinstitucional la recuperación del Río Atoyac y las zonas aledañas, además dio a conocer las acciones que ha realizado el gobierno del estado y los municipios.
Por su parte, Eduardo Andrés Galván Torres, director del Organismo de Cuenca del Balsas de CONAGUA, dio a conocer que de acuerdo con el inventario de aguas de plantas de tratamiento municipales, existen 62 plantas sin operar y 56 en operación de un total de 188.
Al encuentro también acudieron autoridades federales y estales, así como municipales de los estados de influencia y de la zona. La directora general del CONACYT, Elena Álvarez Buylla Roces, participó a distancia, y la gobernadora de Tlaxcala, Lorena Cuellar Cisneros, envío a un representante para el acto inaugural.
Por parte del gobierno del estado de Tlaxcala, la representante y encargada de exponer las acciones fue Alma Griselda Pinillo Flores, quien se desempeña en el Departamento de Cambio Climático de la Secretaría de Medio Ambiente. Mientras que la titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial, Beatriz Manrique, fue la encargada de presentar las Acciones de Saneamiento del Ejecutivo del Estado de Puebla.
El rector de la Universidad Autónoma de Tlaxcala, Serfarín Ortiz Ortiz, dio la bienvenida a todos los asistentes y realizó la inauguración del foro que se desarrollará del 12 al 14 de octubre en esta institución.
Las organizaciones de la sociedad civil participantes como la Coordinadora por un Atoyac con Vida, el Centro Fray Julián Garcés de Derechos Humanos y Desarrollo Local A.C., la Pastoral de Derechos Humanos y las Comunidades afectadas de los municipios de Tlaxcala y Puebla, externaron, mediante diagnósticos y datos duros, su preocupación por la situación de contaminación en el río.
Las propias organizaciones han documentado los hallazgos aparecidos en las investigaciones en torno a la cuenca, en la cual se han encontrado metales pesados y químicos tóxicos como mercurio, níquel, plomo cianuro, arsénico, cobre, cromo, cadmio, zinc, tolueno, dibromoclorometano, cloroformo, cloruro de vinilo, cloruro de metilo, fenoles, compuestos de benceno, nitritos y nitratos, xilenos, sólidos suspendidos, entre otros.