Un punto de venta de drogas disfrazado de pizzería; una familia originaria de Veracruz que arribó al municipio de Atlixco para iniciar su negocio de narcomenudeo; 10 personas asesinadas, dos de ellos menores de edad y todos con el tiro de gracia; decenas de pruebas decomisadas que aportan datos sobre un ajuste de cuentas, fue el parte rendido por el fiscal General del Estado, Gilberto Higuera Bernal, sobre el multihomicidio ocurrido en la calle Francisco I. Madero en Atlixco, que se ha vuelto un hecho de alcance nacional.
El multihomicidio del pasado 8 de marzo obligó a la Fiscalía General del Estado a emitir una respuesta inmediata respecto a la información sobre el móvil de los asesinatos. Con un suceso de esta magnitud, la especulación no se hace esperar, situación por lo que se brindaron algunos detalles sobre los hechos de Atlixco, a fin de apaciguar las controversias al respecto.
A invitación del propio gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, el titular de la FGE reveló la lista de elementos que recabaron de las primeras diligencias en el “inocente” negocio de pizza familiar, que terminó con un trasfondo criminal que, hasta cierto punto, explica ciertas respuestas de la masacre.
Más allá de su participación en hechos delictivos que generó la barbarie, el fiscal Higuera Bernal lanzó el compromiso de esclarecer los hechos y dar con todos los responsables del multihomicidio. Opinión que refrenda los dichos del gobernador respecto a no permitir que las bandas se declaren ganadoras del territorio.
Elementos clave
La Agencia de Investigación localizó en la escena del crimen una gran cantidad de elementos que evidencian la participación de la familia en un tema delictivo, tales son: una báscula para pesar sustancias, bolsas de plástico (supuestamente para envolver la mercancía), nueve libretas que detalla movimientos de cargas enormes y, lo más importante, residuos de cristal y mariguana.
Los peritos hallaron también 8 cartuchos activos de calibre 7.62 mm y 18 casquillos percudidos, todos de calibre 9 mm, armas usadas para ultimar la vida de 10 personas, todas ellas con tiros en la cabeza, así como 7 ojivas deformadas; bebidas alcohólicas, carteras, identificaciones de sólo 3 personas, motocicletas, un auto y dos chips para celular.
10 víctimas
En la escena del crimen, los primeros respondientes y posteriormente los agentes ministeriales hallaron a 10 personas, 9 de ellas sin vida y una al borde de la muerte, aunque su agonía duró unas horas en el Complejo Médico Río Arronte, pues los disparos recibidos en su cabeza y pierna, al final le quitaron la vida.
La investigación llevó a los agentes a dialogar con la familia de los occisos y testigo de los hechos. Los datos arrojados de las entrevistas permitieron conocer que dos de los asesinados (un hombre y una mujer) eran menores de edad, todos ellos oriundos del Estado de Veracruz.
Los cateos derivados de la investigación, llevaron a la Fiscalía a incautar más elementos que permiten constatar la participación delictiva de la familia, con el hallazgo de armas de de calibre 22 mm, 11 motos y paquetes de marihuana y cristal.
Lucha de bandas
La línea de investigación que sigue la autoridad fiscal es precisamente una lucha por el terreno de venta de drogas, tema que ha sido el común denominador en las balaceras y asesinatos en diferentes regiones de Puebla, casos que, garantizó, tienen un avance considerable.
Al respecto, el gobernador Miguel Barbosa Huerta reiteró el mensaje y la advertencia contra el crimen organizado, pues aseguró que ni Atlixco, ni ningún municipio de Puebla será lugar para la instalación de la delincuencia, ni para la disputa del suelo.
¿Negocios pantalla?
La madrugada del jueves, la FGE actuó para esclarecer los eventos, a través del cateo y clausura de cinco sucursales de comida rápida llamado “Mr. Frank” del municipio de Atlixco, vinculadas al sangriento evento del pasado martes, cuyos dueños negaron ser partícipes de la venta de sustancias ilícitas.
